LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

SEIS DE AGOSTO
LA SANTA TRANSFIGURACIÓN
DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO
SIENDO ÉSTA UNA FIESTA SEÑORIAL,
Todo el Oficio será dedicado a la fiesta, aunque a veces caiga en un día domingo.

GRANDES VÍSPERAS
Pues, por Tu Amor a la humanidad
Después del Salmo Vespertino: “Bendice alma
y por Tu Soberanía, quisiste mos-
mía al Señor...”, directamente el Sacerdote o
trarles el esplendor de la Resurrec-
Diácono dice la Gran Letanía, y sobre “Oh Se-
ción. Haznos también dignos de
ñor a Ti he clamado...” serán retenidos Seis
Stíjos y serán cantadas las siguientes Cuatro
ello, Oh Dios, en paz, porque Tú
Estijéras Idiomálatas, repitiendo las dos
eres Bondadoso y Amante de la
primeras.
humanidad.
Por el Monje Cosme - Tono Cuarto
Se repite
Oh Señor, cuando Te transfigu-
Cuando Te transfiguraste, Oh
raste antes de Tu Crucifixión, la Salvador, resplandeciendo glorio-
montaña apareció como cielo y la samente en una montaña alta, en
nube se extendió formando un ta- presencia de tus principales discí-
bernáculo. Y desde el seno del Pa- pulos, demostraste que aquellos
dre se dio testimonio de Ti. Y que alcancen las alturas por sus vir-
estuvieron presente, Pedro, Santia- tudes, serán considerados dignos
go y Juan, los que habían de estar de la gloria divina. Más conversan-
contigo también en el momento de do con Cristo, Moisés y Elías, mos-
Tu traición; Para que, habiendo traron que Él es el Señor de los
contemplado Tus Maravillas, no vivos y los muertos; Y que es el
teman durante Tu Pasión. Ante la Dios que habló antiguamente por
cual, haznos también dignos de medio de la ley y los profetas. Del
prosternarnos en paz, por Tu Gran cual, desde la nube luminosa, la
Misericordia.
voz del Padre dio testimonio, di-
Se repite
ciendo: “¡Escuchadle! Él es, Quién
Antes de Tu Crucifixión, Oh por la Cruz conquistó al infierno,
Señor, llevaste a Tus discípulos a concediendo a los muertos la vida
una montaña alta, y delante de eterna.
ellos, Te transfiguraste, iluminán-
doles con los rayos de Tu Poder.
La montaña, que fue antigua-
mente oscurecida por el humo, se

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ha devenido ahora en santa y vene-
contemplar en ella al Señor de la
rada, pues Tus Pies la pisaron, Oh gloria.
Señor. Porque, en el final de los
E
tiempos, Tu Transfiguración temi-
L ISODÓN
La Entrada con el incensario
ble delante de Pedro, Juan y San-
tiago, hizo manifiesto el misterio, “Oh Luz Radiante de la Gloria Santa...”
que estuvo oculto desde los siglos.
PROKÍMENON Y LECTURAS
Más aquéllos, siendo Incapaces de
El Prokímenon es del día, -refiérase al Oficio de
soportar el resplandor de Tu Rostro
las Víspers- seguido directamente por el anuncio
del Diácono o Sacerdote: “Sabiduría”, el Lector
y el brillo de Tu Vestido, se postra-
canta el título de la Lectura. Diácono o Sacerdote:
ron con los rostros en tierra, en-
“Atendamos”
vuelto de asombro y maravillados,
Lector:
viendo a Moisés y Elías conversan-
Primera Lectura del Libro de Éxodo
do contigo acerca de las cosas que
[Éxodo 24: 12 - 18]
iban a ocurrirle. Y una voz, desde el
12Dijo el Señor a Moisés: “Sube
seno del Padre, daba testimonio hasta mí, al monte; quédate allí, y
diciendo: “Éste es mi Hijo Amado, te daré las tablas de piedra, --la ley
en quien me complazco; Escuchad-
y los mandamientos-- que tengo
le”. Él es quién concede al mundo escritos para su instrucción”. 13Se
la gran misericordia.
levantó Moisés, con Josué, su ayu-
dante; y subieron al monte de Dios.
Gloria... Ahora... Amén - Tono Sexto
Por Anatolio
14Dijo Moisés a los ancianos: “Espe-
Prefigurando Tu Resurrección, radnos aquí hasta que volvamos a
Oh Cristo Dios nuestro, subiste al vosotros. Ahí quedan con vosotros
Monte Tabor, llevando contigo a Aarón y Jur. Él que tenga alguna
tres de Tus discípulos, Pedro, San-
cuestión que recurra a ellos”. 15Y
tiago y Juan. Y cuando Te transfi-
subió Moisés al monte. La nube cu-
guraste, Oh Salvador, el Monte brió el monte. 16La gloria del Señor
Tabor se cubrió de luz. Mas Tus descansó sobre el monte Sinaí y la
discípulos, Oh Verbo, siendo inca-
nube lo cubrió por seis días. Al sép-
paces de soportar la contemplación timo día, llamo el Señor a Moisés
de Tu figura, la cual nadie puede de en medio de la nube. 17La gloria
contemplar, se postraron en la tie-
del Señor aparecía a la vista de los
rra. Los ángeles estaban sirviendo hijos de Israel como fuego devora-
con temor y temblor; Los cielos se dor sobre la cumbre del monte.
estremecieron y la tierra tembló al 18Moisés entró dentro de la nube y
subió al monte. Y permaneció Moi-

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sés en el monte cuarenta días y por tu nombre”. 18Entonces dijo
cuarenta noches.
Moisés: “Déjame ver, por favor, Tu
Lector:
Gloria”. 19Él le contestó: “Yo haré
Segunda Lectura del Libro de Éxodo
pasar ante tu vista toda mi bondad
[Éxodo 33: 11 - 23, 34: 4 - 6, 8]
y pronunciaré delante de ti el nom-
En aquellos días, 11El Señor bre del Señor; Pues hago gracia a
hablaba el a Moisés cara a cara, quien hago gracia y tengo miseri-
como habla un hombre con su ami-
cordia con quien tengo misericor-
go. Luego volvía Moisés al cam-
dia”. 20Y añadió: “Pero mi rostro no
pamento, pero su ayudante, el podrás verlo; Porque no puede
joven Josué, hijo de Nun, no se verme el hombre y seguir vivien-
apartaba del interior de la tienda. do”. 21Luego dijo el Señor: “Mira,
12Dijo Moisés al Señor: “Mira, Tú hay un lugar junto a Mí; tú te colo-
me dices: ‘Haz subir a este pueblo’; carás sobre la peña. 22Y al pasar Mi
Pero no me has indicado a quién Gloria, te pondré en una hendidura
enviarás conmigo; A pesar de que de la peña, y te cubriré con Mi Ma-
me has dicho: ‘Te conozco por tu no hasta que yo haya pasado.
nombre, y también has hallado gra-
23Luego apartaré mi mano, para
cia a mis ojos’. 13Ahora, pues, si que veras mis espaldas; Pero Mi
realmente he hallado gracia a Tus Rostro no se puede ver.
ojos, hazme saber Tu camino, para
Y continúa
que yo Te conozca, y halle gracia a
34:4Labró Moisés dos tablas de
Tus ojos, y mira que esta gente es piedra como las primeras y se le-
Tu pueblo”. 14Respondió Él: “Yo vantándose de mañana, subió al
mismo iré contigo, y te dará des-
monte Sinaí, como le había manda-
canso”. 15Contes-tóle: “Si no vienes do el Señor, llevando en su mano
Tú mismo, no nos hagas partir de las dos tablas de piedra. 5Descendió
aquí. 16Pues ¿en qué podrá conocer-
el Señor en forma de nube y se pu-
se que he hallado gracia a Tus ojos, so allí junto a él. Moisés invocó el
yo y Tu pueblo, sino en que Tú nombre del Señor. 6El Señor pasó
marches con nosotros? Así nos dis-
por delante de él y exclamó: “¡Se-
tinguiremos yo y Tu pueblo, de to-
ñor! ¡Señor! Dios misericordioso y
dos los pueblos que hay sobre la Clemente; Tardo a la cólera, y rico
tierra”. 17Respondió el Señor a Moi-
en amor y fidelidad. 8Al instante,
sés: “Haré también esto que me Moisés cayó en tierra de rodillas y
acabas de pedir, pues has hallado se postró.
gracia a mis ojos, y yo te conozco
Lector:

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Tercera Lectura del Libro de Éxodo
pués del fuego, el susurro de una
[1° Reyes 19: 3 - 9, 11 - 13, 15 - 16]
brisa suave. 13Al oírlo Elías, cubrió
3En aquellos días Elías llegó a su rostro con el manto, salió, y se
Bir’sebá de Judá, y dejó allí a su puso a la entrada de la cueva. Le
criado. 4Él caminó por el desierto fue dirigida una voz del Señor, que
una jornada de camino, y fue a sen-
le dijo: 15“Anda vuelve por tu ca-
tarse bajo una retama. Se deseó la mino hacia el desierto de Damasco.
muerte y dijo: “¡Basta ya, Oh Señor! 16Vete y unge a Eliseo hijo de Safat,
¡Toma mi vida, porque no soy yo como profeta en tu lugar”.
mejor que mis padres!”. 5Se acostó
y se durmió bajo una retama, pero
EL LITÍN
Estijéras Idiómalas - Tono Segundo
un ángel le tocó y le dijo: “Levánta-
Oh Tú, que por Tu Bondad has
te y come”. 6Miró y vio a su cabece-
santificado con Tu Luz a toda la
ra una torta cocida sobre piedras habitada tierra; Te transfiguraste en
calientes y un jarro de agua. Comió una montaña alta mostrando Tu
y bebió, y se volvió a acostar. Poder a Tus discípulos; Y que re-
7Volvió segunda vez el ángel del dimirás al mundo de la transgre-
Señor, le tocó y le dijo: “Levántate y sión. Por tanto, a Ti exclamamos:
come, porque el camino es dema-
“¡Oh Señor Compasivo, salva nues-
siado largo para ti”. 8Se levantó, tras almas!”.
comió y bebió, y con la fuerza de
aquella comida caminó cuarenta
Oh Cristo Dios, que Te transfi-
días y cuarenta noches hasta el guraste en gloria sobre el Monte
Monte Horeb, el monte de Dios. Tabor, y revelaste a Tus discípulos
9Allí entró en la cueva, y pasó en el esplendor de Tu Divinidad; Ilu-
ella la noche. Le fue dirigida la pa-
mínanos, también a nosotros, con la
labra del Señor, que le dijo: 11“Sal y luz de Tu Conocimiento y guíanos
ponte en el monte ante el Señor”. Y en el camino de Tus Mandamien-
he aquí que el Señor pasaba. Hubo tos; Porque eres Bondadoso y Úni-
un huracán tan violento que hendía co Amante de la Humanidad.
las montañas y quebrantaba las ro-
Cristo, la Luz que brilló desde
cas ante el Señor; pero no estaba el antes de la existencia del sol; Quien
Señor en el huracán. Después del anduvo corporalmente sobre la tie-
huracán, un temblor de tierra; Pero rra. Después de haber cumplido
no estaba el Señor en el temblor. todo lo relacionado con Su Dispen-
12Después del temblor, fuego, pero sación temible, como es digno de
no estaba el Señor en el fuego. Des-
Dios, antes de Su Crucifixión, reve-

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LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

la místicamente en el Monte Tabor, ¡Escuchadle! Entonces, Tú, Oh Cris-
este día, la figura de la Trinidad. to, el Dios Amante de la humani-
Porque llevó consigo a solas, los dad, ilumínanos, a nosotros
tres discípulos que Él había escogi-
también, con la luz de Tu Gloria
do expresamente, Pedro, Santiago y Inaccesible, haciéndonos herederos
Juan. Mas ocultó de ellos, durante dignos de Tu Reino Eterno, Tú que
un tiempo corto, la figura carnal excedes toda bondad.
que Él había asumido, y se transfi-
Gloria... - Tono Quinto
guró ante ellos, manifestándoles la
¡Venid! Subamos a la montaña
excelencia de la belleza de la esen-
del Señor, y a la casa de nuestro
cia original. Esta no ha sido una Dios, y contemplamos la gloria de
manifestación plena; Pero ha sido, Su Transfiguración, como la gloria
por un lado, causa de convicción a del Unigénito del Padre. Recibamos
ellos, y por otro, expresión de Su la luz de la Luz y ascendiendo en el
Compasión, para que no perdieran espíritu, alabemos a la Trinidad
la vida al contemplar. Por lo tanto Consubstancial por todos los siglos.
se manifestó a ellos, a medida que
Ahora... - Mismo Tono
sus ojos corporales pudieron con-
Oh Cristo, Moisés quién vio a
templar. Más presentó ante Él a los Dios y Elías que montó en el Ca-
profetas principales Moisés y Elías, rruaje de fuego, apresurándose
testigos de la veracidad de Su Di-
hacia el cielo, sin consumirse;
vinidad, y que Él es de hecho el Cuando contemplaron Tu Transfi-
resplandor de la sustancia del Pa-
guración en la nube, atestiguaron
dre, el Soberano de los vivos y los que Tú eres el Hacedor y el Cum-
muertos. Pues una nube los envol-
plidor de la Ley y los Profetas. Con
vió como una tienda; Y de la nube, ellos, haznos digno también de Tu
desde lo alto, resonó la voz del Pa-
luz, Oh Soberano, a nosotros que
dre, dando testimonio de Él, di-
cantamos Tus Alabanzas por los
ciendo: “Éste es mi Hijo Amado, siglos.
que Yo he engendrado, sin cambio
alguno, desde el seno, antes de la
Sacerdote o Diácono:
LA EKTANÍA
aurora de la mañana, Él que yo he
“La Súplica Ferviente ...”
enviado para salvar aquéllos bauti-
Lector: “Haznos Dignos, Señor,...”
zados en el nombre de Padre, del
Sacerdote o Diácono:
Hijo y del Espíritu santo; Quienes “Completemos nuestras suplicas
con fe confiesan que el Un Sólo Po-
vespertinas ...”
der de la Trinidad es indivisible.

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LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

LAS APOSTÍJAS
(Stíjo) El Tabor y el Hermón exultan en Tu
Estijéras Idiómalas - Tono Primer
Nombre. (Ídem 13)
Él que antiguamente y por
Al contemplar sobre el Monte
medio de símbolos, habló a Moisés de la Transfiguración, la emanación
en el Monte Sinaí, diciendo: “Yo de Tu Luz Inaguantable y Tu Divi-
soy el que soy”, se transfiguró hoy, nidad Inaccesible, Oh Cristo sin
en el Monte Tabor, ante los discípu-
principio; Tus apóstoles preelegi-
los; Mostrando en Su propia perso-
dos, fueron alcanzados por un
na la hermosura de la imagen asombro divino; Y al ser ilumina-
original, revestida de la naturaleza dos por la luz de la nube brillante,
humana. Llamó a Moisés y a Elías oyeron la voz del Padre confir-
para dar testimonio de esta Gracia, mando el misterio de Tu Encarna-
haciéndolos partícipes de Su Ale-
ción. Porque sigue siendo Uno, aún
gría; Preanunciando Su Muerte Re-
después de la encarnación, y que
dentora por medio de la Cruz y Su eres el Hijo Unigénito y el Salvador
Resurrección Salvífica.
del mundo.
(Stíjo) Tuyo es el cielo, Tuyo también la
Gloria... Ahora... - Tono Sexto
tierra, el orbe y cuanto encierra Tú fun-
Hoy, Oh Señor, en el Monte
daste. (Salmo 88 ‘89’: 12)
Tabor, manifestaste la gloria de Tu
David, el antepasado de Dios, Imagen Divina a Tus discípulos es-
anticipó y vio en el espíritu, Tu Ve-
cogidos, Pedro, Santiago y Juan.
nida en la carne hacia los hombres, Porque ellos vieron Tus Vestidos
Oh Hijo Unigénito. De lejos llamó brillando como la luz; Y Tu Rostro,
la creación a regocijarse con él, y más resplandeciente que el sol; Y
alzó su voz exclamando profética-
no pudieron soportar la contempla-
mente: “El Tabor y el Hermón exul-
ción de Tu resplandor inaguanta-
tan en Tu Nombre”. Porque ble; Mas, completamente
habiendo subido con Tus discípu-
impotentes de fijar la vista y mirar,
los en este Monte, Oh Salvador, y cayeron a la tierra; Y oyeron una
transfigurándote has hecho res-
voz desde lo alto, dando testimonio
plandecer también, la naturaleza y diciendo: “Este es Mi Hijo Ama-
oscurecida de Adán; devolviéndole do, que vino al mundo para salvar
el esplendor y la gloria de Tu Pro-
la humanidad.
pia Divinidad. Por lo tanto, a Ti ex-
El que preside:
clamamos: “¡Oh Señor y Creador
La Oración del Justo Simeón:
de todos, gloria a Ti!”.
Ahora, Señor, despides a Tu
siervo en paz, conforme a Tu Pala-

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LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

bra; Porque han visto mis ojos Tu
Te transfiguraste en el Monte
Salvación, la cual has preparado en Tabor, Oh Salvador, mostrando la
presencia de todos los pueblos; Luz transformación de los mortales, que
para revelación a los gentiles y glo-
se realizará, con gloria, en Tu Se-
ria de Tu Pueblo Israel. (Lucas 2: 29 - 32)
gunda Temible Venida. Moisés y
Lector, en presencia del señor Obispo:
Elías estaban conversando contigo;
Por muchos años de vida, Monseñor.
Mas cuando los tres discípulos que
Sino directamente:
Tú habías convocado para estar
“Santo Dios, Santo Fuerte,...” hasta el
contigo, Oh Soberano, vieron Tu
“Padrenuestro”
Gloria, quedaron atónitos de Tu
Sacerdote: “Porque tuyo es el Poder...”
Resplandor deslumbrante. Oh Tú,
Coro: Tropario - Tono Séptimo
que en aquel entonces, brillaste en
Cuando Te transfiguraste, Oh ellos con la luz de Tu Gloria, ilumi-
Cristo Dios, en la montaña; Reve-
na ahora nuestras almas.
laste Tu Gloria a los discípulos se-
gún ellos pudieron contemplar.
Gloria... Ahora... Se repite
Haz resplandecer Tu Luz Eterna
Después de la Segunda Estijológia
sobre nosotros pecadores; Por las
SEGUNDA KATÍSMATA - Tono Cuarto
Oh Jesús, Te transfiguraste en
intercesiones de la Madre de Dios; el Monte Tabor, y la nube brillante,
¡Tú que otorgas la luz, gloria a ti!
se extendió como una tienda, cu-
Se repite tres veces
briendo a los Apóstoles de Tu Glo-
APÓLISIS
ria. Pues, cayeron rostro a tierra, al
Oh Cristo nuestro Dios Verda-
no poder contemplar el resplandor
dero, que fuiste transfigurado con de la gloria inaccesible de Tu Ros-
gloria en el Monte Tabor, ante Tus tro, Oh Cristo Salvador, nuestro
santos Apóstoles, para nuestra sal-
Dios sin principio. Oh Tú, que en
vación, por las intercesiones de Tu aquel entonces, brillaste en ellos
purísima madre...
con la luz de Tu Gloria, ilumina
ahora nuestras almas.

Gloria... Ahora... Se repite
LOS MAITINES
EL POLIÓLION
Después de los seis salmos y sobre “El Señor es
Aleluya, Aleluya, Aleluya.
Dios..” se canta el Tropario, como en las vísperas.
Y detrás de cada pausa se dice: Aleluya
LAS KATÍSMATAS
01Grande es el Señor y digno de ser
Después de la Primera Estijológia
alabado en gran manera.(Salmo 47 “48”:
PRIMERA KATÍSMATA - Tono Cuarto
1)

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LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

02En la ciudad de nuestro Dios, en 21Tú creaste el norte y el orbe y
Su Monte Santo. (Ídem)
cuan-to encierra. (Ídem 12 - 13)
03Que afirma los montes con Su 22El Tabor y el Hermón exultan en
Poder. (Salmo 64 “65”: 7)
Tu Nombre. (Ídem)
04Él que se reviste de esplendor 23Este monte que Tu Diestra
como y majestad. (Salmo 103 “104”: 2)
conqui-stó. (Salmo 77 “78”: 54)
05Gloria y majestad están ante Él.
24¿Quién subirá al monte del Señor?
(Salmo 94 “95”: 9)
(Salmo 23 “24”: 3)
06Destilan los pastos del desierto.
25¿Quién podrá estar en Su Recinto
(Salmo 64 “65”: 12)
santo? (Ídem)
07las colinas se ciñen de alegría. (Ídem)
26Hará brillar como la luz Tu Justi-
08El monte de Dios; ¡Monte escarpa-
cia, y Tu Derecho igual que el me-
do el monte de Basán! (Salmo 67 “68”: 16)
diodía. (Salmo 36 “37”: 6)
09¿Quién subirá al Monte del
27Sino que fueron Tu Diestra y Tu
Señor? (Salmo 23 “24”: 3)
Brazo, y la luz de Tu Rostro. (Salmo
10¿Quién podrá estar en Su Recinto
43 “44”: 4)
santo? (Ídem)
28A la luz de Tu Rostro caminan,
11Oh Señor, ¿Quién morará en Tu
Oh Señor. (Salmo 88 “89”: 16)
Tienda? (Salmo 14 “15”: 1)
29En Tu Nombre se alegran todo el
12¿Quién habitará en tu monte
día. (Ídem: 17)
santo? (Ídem)
30Y que la dulzura del Señor sea
13Envía Tu Luz y Tu Verdad. (Salmo 43:
con nosotros, desde ahora y por
3)
los siglos. (Salmo 89 “90”: 17)
14Ellas me guíen y me conduzcan a
Tu Monte Santo.
Pequeña Letanía
(Ídem)
15Fulgurante eres Tú, Maravilloso
TERCERA KATÍSMATA - Tono Cuarto
por los montones de botín.
Oh Tú, que has ascendido a la
(Salmo 75
“76”: 5)
montaña con los discípulos, has bri-
16Tuyo es el día, tuya también la llado con la Gloria del Padre. Moi-
noche. (Salmo 73 “74”: 16)
sés y Elías se presentaron de pie a
17Tú la luna y el sol estableciste. Tu Lado. Pues, siendo Dios, la Ley
(Ídem)
y los Profetas Te sirvieron; Mas el
18Tú trazaste todos los confines de Padre reconociendo Tu Filiación
la tierra. (Ídem: 17)
natural, Te llamó Hijo. Nosotros a
19El verano y el invierno Tú
Él alabamos junto a Ti y al Espíritu.
formaste. (Ídem)
20Tuyo es el cielo, tuya también la
Gloria... Ahora... Se repite
tierra.
EL ANÁVTEMI
(Salmo 88 “89”: 12)
El Anávtemi es de la Primera Antífona del Tono
Cuarto de la Resurrección.

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LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

Desde mi juventud muchas Nótese que la lectura del Santo Evangelio será
pasiones han batallado contra mí,
desde la Puerta Real
Lectura del Santo Evangelio según San
pero Tú, Oh Salvador, Sostenme y
[Lucas 9: 28 - 36]
sálvame. Se repite
28Sucedió que uno ocho días
Vosotros que odiáis a Sión, sed después de estas palabras, tomó a
avergonzados ante el Señor; porque Pedro, Juan y Santiago, y subió al
como la hierba seca en el fuego, así monte a orar. 29Y sucedió que mien-
vosotros seréis marchitados. Se repite tras oraba, el aspecto de Su Rostro
Gloria...
mudó, y sus vestidos eran de una
Por el Espíritu Santo, toda blancura fulgurante. Resplande-
alma se vivifica y se purifica, ciente. 30Y he aquí que conversaban
exaltándose y brillando por la con Él dos hombres, varones que
Trinidad Una en un estado eran Moisés y Elías; 31Los cuales
honorable y místico.
aparecían en gloria, y hablaban de
Ahora...
Su Partida, que iba a cumplir en
Por el Espíritu Santo, los ma-
Jerusalén. 32Pedro y sus compañe-
nantiales y arroyos de la Gracia se ros estaban cargados de sueño, pe-
rebalsan y llenan al mundo con vi-
ro permanecían despiertos, y
da vivificadora.
vieron Su Gloria, y a los dos hom-
E
bres que estaban con Él. 33Y sucedió
L PROKÍMENON
Tono Cuarto
que, al separarse ellos de Él, dijo
El Tabor y el Hermón exultan en Tu Nombre.
Pedro Jesús: “Maestro, bueno es
(Salmo 88 ‘89’: 13)
estarnos aquí. Vamos a hacer tres
Se repite
tiendas, una para ti, otra para Moi-
(Stíjo) Tuyo es el cielo, Tuyo también
la tierra, el orbe y cuanto encierra
sés, y otra para Elías”, sin saber lo
Tú fundaste.
que decía. 34Estaba diciendo estas
(Ídem: 12) Y se repite:
El Tabor y el Hermón exultan en
cosas cuando se formó una nube y
Tu Nombre.
los cubrió con su sombra; y entran
en la nube, se llenaron de temor.
Después de la exclamación del Sacerdote: “Por-
35
que Tú eres Santo, Oh Dios Nuestro,…”
Y vino una voz desde la nube, que
decía: “Este es mi Hijo amado, mi
Coro:
Toda alma que alabe al Señor. (Tres veces)
Elegido; escuchadle”. 36Y cuando la
E
voz hubo sonado, se encontró Jesús
L EVANGELIO MATUTINO
solo. Ellos callaron y, por aquellos
Sacerdote o Diácono:
“Para que seamos dignos de escuchar el
días no dijeron a nadie nada de lo
Santo Evangelio,...”
que habían visto.
Coro:

9

LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

Gloria a Ti, Señor, Gloria a Ti.
ofrezco un holocausto, no lo acep-
El lector procede directamente con el Salmo 50
tas. 19El sacrificio a Dios es un espí-
3Tenme piedad, Oh Dios, se-
ritu contrito; Un corazón contrito y
gún Tu Amor, por Tu Inmensa Ter-
humillado, Oh Dios, no lo despre-
nura borra mi delito. 4Lávame a ciarás. 20¡Favorece a Sión en tu be-
fondo de mi culpa y de mi pecado nevolencia, reconstruye las
purifícame. 5Pues mi delito yo lo murallas de Jerusalén! 21Entonces te
reconozco, mi pecado sin cesar está agradarán los sacrificios justos, --
ante mí. 6Contra Ti, contra Ti solo holocaus- to y oblación entera-- se
he pecado, lo malo a Tus Ojos co-
ofrecerán entonces sobre tu altar
metí. Porque aparezca Tu Justicia novillos.
cuando hablas y Tu Victoria cuan-
Cantor:
do juzgas. 7Mira que en culpa yo
Tono Segundo
Gloria...
nací, pecador me concibió mi ma-
Por las intercesiones y las sú-
dre. 8Más Tú amas la verdad en lo plicas de los Apóstoles ¡Oh Piado-
íntimo del ser, y en lo secreto me so! Borra la multitud de nuestros
enseñas la sabiduría. 9Rocíame con pecados y transgresiones.
el hisopo y será limpio; Lávame, y
Ahora...
quedaré más blanco que la nieve.
Por las intercesiones y las sú-
10Devuélveme el son del gozo y la plicas de la Madre de Dios ¡Oh
alegría, exulten los huesos que ma-
Piadoso! Borra la multitud de nues-
chacaste Tú. 11Retira Tu Faz de mis tros pecados y transgresiones.
pecados y borra todas mis culpas.
Segundo Tono
12Crea en mí, Oh Dios, un puro co-
Ten piedad de mí, Oh Dios,
razón, un espíritu firme dentro de conforme a Tu misericordia; Con-
mí renueva; 13No me eches lejos de forme a la multitud de Tus pieda-
Tu Rostro, no retires de mí Tu San-
des borra mis rebeliones.
to Espíritu. 14Vuélveme la alegría
Y esta Idiomálata
de Tu Salvación, y en espíritu gene-
Oh Tú, que por Tu Bondad has
roso afiánzame; 15Enseñaré a los santificado con Tu Luz a toda la
rebeldes Tus caminos, y los peca-
tierra; Te transfiguraste en una
dores volverán a Ti. 16Líbrame de la montaña alta, y mostraste Tu Poder
sangre, Oh Dios, Dios de mi salva-
a Tus discípulos; Y que redimirás al
ción, y aclamará mi lengua Tu jus-
mundo de la transgresión. Por tan-
ticia. 17Abre, Señor, mis labios, y to, a Ti exclamamos: “¡Oh Señor
publicará mi boca tu alabanza. Compasivo, salva nuestras almas!”
18Pues no Te agrada el sacrificio, si

10

LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

Sacerdote o Diácono: “Salva, Oh Señor a
Dios, porque Él ha sido glorifica-
Tu Pueblo y Bendice Tu Here-
do!”
dad...”
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
Y después de la exclamación del Sacerdote:
Oh discípulos y amados Míos,
“Por la misericordia y compasión de Tu
‘La riqueza de las naciones come-
Hijo Unigénito…” se canta
réis y de ella jactaréis, mas os llena-
réis de su gloria’
E
(Isaías 61: 6); Y para
L CANON
cuando yo apareceré brillando más
Nótese que serán cantados Los Dos Cánones, el
Primero, en ocho troparios, es por San Cosme el
luminoso que el sol, vosotros con
Monje en el Cuarto Tono; Y el Segundo es por
júbilo cantareis: “¡Alabemos a
San Juan Damasceno, en seis troparios. Los Irmos
nuestro Dios, porque Él ha sido
de cada Canon serán cantados dos veces -al inicio
y final de cada Oda- mas antes de cada tropario
glorificado!”
decimos:
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria aTi!”
Hoy, Cristo ha brillado en
Al final del cántico de cada parte de ambos
Monte Tabor, con resplandor ocul-
cánones, será cantada la Katavasía que está
to, y reveló a Sus discípulos, como
tomada de la fiesta de la Exaltación de la Santa
Cruz, como sigue:
Él les ha prometido, la imagen del
PRIMER CANON
Brillo Divino. Pues, llenos de la res-
Por San Cosme el Monje - Tono Cuarto
plandeciente muy luminosa Luz
PRIMERA ODA - Irmo
Divina, con júbilo cantaron: ¡Ala-
Los coros de Israel cruzaron bemos a nuestro Dios, porque Él ha
por el mar Rojo y el profundo sido glorificado!”
húmedo a pies secos; Y cuando vie-
ron a los jinetes y capitanes del
SEGUNDO CANON
Por San Juan Damasceno - Tono Octavo
enemigo, tragados por las aguas,
PRIMERA ODA - Irmo
cantaron jubilosamente: “¡Alabe-
Habiendo cruzado el agua,
mos a nuestro Dios porque Él ha como si había sido tierra seca, y es-
sido glorificado!”
capando de la maldad de Egipto,
Troparios
los niños de Israel exclamaron:
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
“¡Alabemos a nuestro Redentor y
Cuando Cristo habló a Sus nuestro Dios!”
Amados, acerca del Reino Divino,
Troparios
con las palabras de la Vida, dicién-
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
doles: “Por Mí, conoceréis al Padre,
Proféticamente, Moisés
la resplandeciente Luz inaccesible, contem-pló en el mar,
así como estoy brillando, con júbilo antiguamente, la gloria del Señor,
cantareis: ¡Alabemos a nuestro en la nube y por la columna de

11

LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

fuego, pues exclamó: “¡Alabemos a
Oh Cristo, Te has revestido de
nuestro Salvador y nuestro Dios!”
Adán enteramente; Cambiaste la
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
naturaleza que creció oscura desde
Moisés quien contempló a antaño, la hiciste resplandecer y la
Dios, viendo al invisible, oculto, en deificaste por la alteración de Tu
el cuerpo divinizado, así como él ha Imagen.
sido oculto por la roca, exclamó:
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
“¡Alabemos a nuestro Salvador y
Aquél, que antiguamente, por
nuestro Dios!”
la nube y la columna de fuego,
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
había conducido a Israel a través
Tú eres quién, en la nube bri-
del desierto, resplandece hoy en el
llosa, apareció antiguamente a Moi-
Monte Tabor con la Luz inefable.
sés, en la montaña oscura de la Ley;
SEGUNDO CANON - TERCERA ODA
Pero ahora, en el Tabor, apareces
Irmo
por la Luz Inaccesible de la Divini-
Oh Señor, constructor de la
dad.
bóveda celestial y Fundador de la
Iglesia, afírmame en Tu Amor; Por-
KATAVASÍA PRIMERA
“Habiendo trazado la señal de la
que Tú eres nuestro deseo supremo
Cruz; Moisés golpeó rectamente las y el apoyo de los creyentes; Pues
aguas con la vara, dividió el Mar
eres el Único Amante de la huma-
Rojo e hizo pasar Israel a pie seco.
nidad.
Y cuando la trazó por segunda vez,
Troparios
las aguas se volvieron sobre el Fa-
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
raón y sus carros; Inscribiendo cla-
La Gloria que una vez cubrió el
ramente el Arma Invencible; Por
tabernáculo envolviendo a Tu sier-
tanto, alabemos a Cristo nuestro
vo Moisés, Oh Maestro, ha sido una
Dios, porque Él ha sido glorifica-
prefiguración de Tu Transfigura-
do.”
ción, que inefablemente ha brillado
como el relámpago en el Tabor.
PRIMER CANON - TERCERA ODA
Irmo
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
Los arcos de los poderosos han
Los líderes de los Apóstoles
sido debilitados y los débiles se han subieron contigo al Monte Tabor,
ceñido con la fuerza. Por tanto mi Oh Verbo Unigénito del Altísimo;
corazón se ha establecido en el al instante, Moisés y Elías se pre-
Señor.
sentaron ante Ti, siendo siervos de
Troparios
Dios, Oh Único Amante de la
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
Humanidad.

12

LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
He oído hablar de Tu Dispen-
Aunque Tú eres un Dios Per-
sación Gloriosa, Oh Cristo nuestro
fecto y Te ha hecho un hombre per-
Dios; Que has nacido de la Virgen
fecto; Uniendo al hombre con la para salvar del error a aquéllos que
plenitud de la Divinidad en Tu Te exclaman: “¡Gloria a Tu Poder
Persona; La cual, en las dos natura-
Oh Señor!”
lezas, vieron Moisés y Elías en el
Troparios
Monte Tabor.
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
Oh Cristo nuestro Dios, has en-
KATAVASÍA TERCERA
“La vara de Aarón, que es una
tregado la Ley escrita en el Monte
Imagen del Misterio; brotando,
Sinaí, y allí has aparecido montado
había señalado al sacerdote.
sobre la nube, en medio del fuego,
Pero ahora, el Madero de la Cruz,
la oscuridad y la tempestad. ¡Gloria
ha brotado una flor en la Iglesia
a Tu Poder, Oh Señor!
estéril desde antaño, que es poder y
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
firmeza.”
Para realizar Tu Dispensación
Gloriosa, has brillado inefablemen-
Katísmata - Tono Cuarto
te montando sobre las nubes en el
Oh Dios, Te transfiguraste en Tabor, Oh Cristo nuestro Dios; Tú
el Monte Tabor, entre los sabios que existes antes de los siglos.
Moisés y Elías y en presencia de
Pedro, Santiago y Juan. Al com-
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
prender Pedro, estando allí de pie,
Oh Cristo Señor, Aquellos con
se dirigió a Ti, diciendo: “Sería quienes habías conversado anti-
bueno hacer tres tiendas aquí: una guamente, por medio del fuego, la
para Moisés, una para Elías y una oscuridad, la nube y la brisa, esta-
para Ti, Oh Cristo Soberano”. Pues ban de pie ante Ti como siervos,
Tú, que brillaste entonces en ellos hablándote. ¡Gloria a Tu Poder Oh
con Tu Luz, ilumina ahora nuestras Señor!
almas.
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
Moisés, quien Te contempló
Gloria... Ahora... - Se repite
“Oh Dios, Te transfiguraste en el
antiguamente en la zarza y el fue-
Monte Tabor…”
go; y Elías quien ascendió en un

carro de fuego, al presentarse ahora
PRIMER CANON - CUARTA ODA
en el Tabor, proclamaron Tu Parti-
Irmo
da por medio de la Cruz, Oh Cristo.
SEGUNDO CANON - CUARTA ODA

13

LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

Irmo
¡Oh Cristo Creador! Tú que
Los rayos radiantes de la Divi-
habías separado la luz de las tinie-
nidad, emanaron de Tu Cuerpo. blas originales, para que Tus Obras
Por consiguiente los escogidos de Te alaben en la luz; Dirige nuestro
los profetas y los Apóstoles canta-
camino en Tu Luz.
ron exclamando: “¡Gloria a Tu Po-
Troparios
der, Oh Señor!”
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
Troparios
Cuando te complaciste en cam-
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
biar la figura humana, las estacio-
Has conservado ilesa la zarza, nes del año se inclinaron ante Ti, y
Oh Soberano, mientras estaba ar-
el sol puso, ante Tus Pies, los rayos
diendo con el fuego; Y mostraste a resplandecientes de su luz.
Moisés un cuerpo resplandeciente
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
con la Divinidad. Por eso cantó:
¡He aquí el Salvador! Exclama-
“¡Gloria a Tu Poder, Oh Señor!”.
ron, Moisés y Elías en el Tabor, el
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
Monte Sagrado. Y sus palabras ro-
El sol visible se eclipsó por los dearon los oídos de los discípulos.
rayos de la Divinidad, Oh Jesús ¡He aquí el Cristo! A Quien, anti-
mío, cuando Te vio transfigurándo-
guamente, hemos proclamado que
te en el Monte Tabor. ¡Gloria a Tu Él es Dios.
Poder, Oh Señor!
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
La naturaleza que no conoce
¡Oh Soberano! Fuiste visto co-
cambio alguno, mezclándose con la
mo un fuego inmaterial que no naturaleza mortal, reveló a los
quema la sustancia material del Apóstoles la inmaterial y oculta
cuerpo. Así como apareciste a Moi-
Luz de la Divinidad, resplande-
sés, a Elías y a los Apóstoles. Tú ciendo inefablemente.
eres Uno en dos personas perfectas
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
y dos naturalezas perfectas.
¡Oh Cristo, Luz Eterna! Cuan-
do Te vieron brillando con la gloria
KATAVASÍA CUARTA
“Oh Señor, yo he oído del Misterio del Padre, los discípulos exclama-
de Tu Dispensación, he considerado ron: “Dirige nuestros caminos en
Tus Obras y he glorificado
Tu Luz”.
Tu Divinidad.”
SEGUNDO CANON - QUINTA ODA
Irmo
PRIMER CANON - QUINTA ODA
Irmo

14

LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

¡Oh Luz que no tiene ocaso! fue extendido. Y por el cual, aquél
¿Por qué has alejado de mí Tu Ros-
quién, por el árbol, engañó la
tro? Y ¿Por qué la extraña oscuri-
humanidad, por Ti cayó engañado.
dad me ha cubierto en mi miseria?
Oh Tú, que concedes la paz a
Sin embargo, Te ruego: “Hazme
nuestras almas.”
volver y dirige mis caminos hacia
P
la luz de Tus Mandamientos”
RIMER CANON - SEXTA ODA
Irmo
Troparios
En mi aflicción, a Ti exclamé,
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
Oh Señor, y el Dios de mi salvación
Ninguna lengua, aunque elo-
me respondió.
cuente, puede hablar de Tus Obras
Troparios
grandiosas. Porque Tú, que eres el
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
Señor de la vida y Soberano de
Cristo, el Salvador, nos ha ilu-
muerte, has llamado a Moisés y Elí-
minado, pues hizo brillar en el Ta-
as ante Ti, en el Monte Tabor, como bor, una luz muy luminosa, y más
testigos de Tu Divinidad.
resplandeciente que la luz del sol.
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
¡Oh Cristo Dios! Tú, que con
Ascendiste al Monte Tabor y
Tus Manos invisibles has formado fuiste transfigurado, Oh Cristo; Y
al hombre a Tu Imagen; Has reve-
has hecho brillar una luz que hizo
lado ahora la belleza original en la oscurecer todo el error.
criatura que formaste. Revelándola,
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
no como figura, sino como Tú eres
Oh Cristo, los apóstoles glorio-
en Tu Propio Ser, haciéndote Dios y sos Te reconocieron como Dios;
hombre a la vez.
Pues en Tabor, maravillados incli-
naron sus rodillas ante Ti.
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
En una unión sin confusión,
SEGUNDO CANON - SEXTA ODA
nos has mostrado, en el Monte Ta-
Irmo
bor, la braza viva de la Divinidad
Sé misericordioso conmigo, Oh
que consume los pecados e ilumina Salvador, pues muchas son mis
las almas; dejando atónitos a Moi-
transgresiones; Mas, Te suplico,
sés, Elías y los discípulos principa-
sácame del abismo del malvado,
les.
porque a Ti exclamo: “Escúchame,
Oh Dios de mi Salvación”.
KATAVASÍA QUINTA
“¡Oh Madero tres veces Bendito!
Troparios
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
Sobre el cual, Cristo el Rey y Señor,

15

LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

¡Qué visión gloriosa y temible ellos pudieron soportar. Para que
ha sido vista hoy! El sol visible bri-
cuando te vieran crucificado, re-
lló desde el cielo; pero desde la tie-
cordaran que Tu Pasión fue volun-
rra, allí en el Monte Tabor, ha taria y proclamaran al mundo, que
brillado el Sol espiritual de la justi-
Tu eres verdaderamente el Res-
cia, más allá de toda comparación.
plandor del Padre.
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
Íkos
La sombra de la Ley ha crecido
Despertad, Oh holgazanes, y
debilitándose y ha pasado, porque no permanezcáis indolentes. Y vo-
Cristo, que es la Verdad, ha venido sotros, Oh pensamientos, que con
plenamente. Así exclamó Moisés en mi alma, se inclinan hacia la tierra,
el Tabor, cuando contempló Tu Di-
levantaos, elevándose hacia las al-
vinidad.
turas de la Ascensión Divina. Y
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
apresurémonos junto a Pedro y los
La columna de fuego mostró hijos de Zebedeo, vayamos al Mon-
simplemente a Moisés el Cristo te Tabor, para que con ellos poda-
Transfigurado; Mas la nube reveló mos contemplar la Gloria de
claramente la Gracia del Espíritu nuestro Dios y oír la voz que ellos
que cubrió Monte Tabor.
oyeron desde lo alto; Pues anuncia-
ron que éste es el Resplandor del
KATAVASÍA SEXTA
Padre.
“Cuando Jonás, extendió sus bra-
Sinaxárion
zos en forma de una cruz, mientras
Hoy la Santa Iglesia celebra la
estaba en el vientre de la ballena;
fiesta de la Transfiguración Santa
Prefiguró claramente la Pasión
de nuestro Señor, Dios y Salvador
Redentora. Y cuando de allí, fue
Jesucristo en el Monte Tabor. Haz-
expulsado después de tres días, pre-
nos dignos, Señor, a nosotros peca-
figuró la Resurrección Maravillosa dores, así como Tus elegidos
de Cristo Dios, que fue crucificado
discípulos, en contemplar Tu Glo-
en la carne y que ilumina al mundo ria Divina Amén.
por Su Resurrección al tercer día.”
PRIMER CANON - SÉPTIMA ODA
KONTAKIÓN- ÍKOS- SINAXÁRION
Irmo

Los Jóvenes hijos de Abraham,
Kontakión
pisotearon antiguamente las llamas
Te transfiguraste, Oh Cristo del horno ardiente en Babilonia, y
Dios, en la montaña; y Tus discípu-
alabaron cantando: “Bendito eres
los contemplaron Tu Gloria, según Tú, Oh Dios de nuestros padres”.

16

LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

Troparios
Ahora lo invisible ha sido reve-
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
lado a los apóstoles, por la Divini-
En el Monte Tabor, los apósto-
dad que ha brillado en la carne en
les, envueltos con la luz de Tu Glo-
el Monte Tabor; pues ellos excla-
ria Inaccesible, Oh Cristo, maron: “Bendito eres Tú, Oh Dios
exclamaron: “Bendito eres Tú, Oh de nuestros padres”.
Dios de nuestros padres”.
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
Asombrados por la maravilla,
Los apóstoles se encantaron en en el Monte Tabor, los apóstoles se
el torbellino de la voz divina, en la temblaron con miedo ante el res-
nube que vertió el rocío, y en Tu plandor del Reino Divino, y excla-
resplandor, Oh Cristo; Pues canta-
maron: “Bendito eres Tú, Oh Dios
ron: “Bendito eres Tú, Oh Dios de de nuestros padres”.
nuestros padres”.
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
Ahora se ha oído lo que jamás
Cuando Pedro Te vio, Oh Cris-
ha sido oído. Porque el Hijo que sin
to, brillándose en el Monte Tabor padre ha venido de la Virgen, reci-
con una luz inaccesible, exclamó be gloriosamente el testimonio por
diciendo: “Bendito eres Tú, Oh la voz del Padre: Que Él es Dios y
Dios de nuestros padres”.
hombre por todos los siglos.
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
Los hijos de Zebedeo estaban
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
No por la adopción Tú has si-
con Cristo, la Esencia y el Creador do el Hijo del Altísimo, mas bien
de la vida, cuando resplandeció por la esencia, Tú has sido el Ama-
como trueno la luz de Su Rostro, do desde la eternidad; Mas sin pa-
cantaron: “Bendito eres Tú, Oh decer cambio has participado de lo
Dios de nuestros padres”.
nuestro; nosotros que Te exclama-
SEGUNDO CANON - SÉPTIMA ODA
mos: “Bendito eres Tú, Oh Dios,
Irmo
por todos los siglos”.
Los hijos de los hebreos, con
audacia pisotearon las llamas en el
KATAVASÍA SÉPTIMA
horno, y cambiaron el fuego en ro-
“El decreto insensato del tirano
cío, cuando cantaron exclamando: incrédulo, estremeció los pueblos.
“Bendito eres Tú, Oh Dios de nues-
Pues lanzaba amenazas y blas-
tros padres”.
femias rechazadas por Dios. Mas
Troparios
ni la furia salvaje bestial, ni el fue-
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
go consumidor pudieron asustar a

17

LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

los tres jóvenes. Pero estando de
Cuando Moisés y Elías estaban
pie juntos en las llamas, donde so-
de pie, con reverencia en Monte
plaba un viento refrescante como el Tabor, contemplaron claramente la
rocío, cantaron:
impronta de la Sustancia Divina; El
‘Bendito eres Tú, Oh alabadísimo,
mismo Cristo, resplandeciente con
Dios de nuestros padres’.”
la Gloria del Padre, y cantaron: “Oh
todos las obras del Señor, bendecid
PRIMER CANON - OCTAVA ODA
Irmo
al Señor”.
Ardiendo con el celo por Dios,
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
los jóvenes en Babilonia, con valen-
El rostro de Moisés irradió an-
tía pisotearon el fuego y las amena-
tiguamente con gloria, por la voz
zas del tirano; Y cuando han sido divina que él oyó en la nube; Pero
arrojados en medio de las llamas, Cristo, se revistió de luz y de gloria
se refrescaron con el rocío y canta-
como de un manto; Porque Él es
ron: “Oh todos las obras del Señor, quién está por naturaleza el Autor
bendecid al Señor”.
de la luz, e ilumina a aquéllos que
Troparios
cantan: “Oh todos las obras del Se-
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
ñor, bendecid al Señor”.
Oh Tú, que por un gesto, todo
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
lo controlas, has subido al Monte
Los discípulos, viendo en el
Tabor con Tus Pies Puros. Allí Tu Monte Tabor a Cristo envolviéndo-
cara brilló más resplandeciente que se con una nube luminosa, cayeron
el sol; Y manifestaste a los electos con sus rostros a tierra; Y con sus
de la Ley y la Gracia, que cantaban: mentes iluminadas, a Él cantaron
“Oh todos las obras del Señor, ben-
junto al Padre y al Espíritu, este
decid al Señor”.
himno de alabanza diciendo: “Oh
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
todos las obras del Señor, bendecid
Cuando la Inconmensurable al Señor”.
Luz que no conoce ocaso, Aquella
SEGUNDO CANON - OCTAVA ODA
que resplandeció inefablemente en
Irmo
el Monte Tabor con una gloria inac-
El tirano Caldeos ordenó calen-
cesible, dando esplendor a la crea-
tar el horno siete veces más, para
ción; Deificó a todo hombre que los tres jóvenes que estaban llenos
cantan: “Oh todos las obras del Se-
del reverente temor a Dios; Pero
ñor, bendecid al Señor”.
viéndolos salvados por un poder
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
mayor, él exclamó: “Oh Jóvenes,

18

LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

bendecid al Creador y Redentor;
Oh Amante de la humanidad,
Oh Sacerdotes, alabadle; Oh pue-
las preocupaciones indolentes, han
blos, exaltadle por todos los siglos”. sido dejadas atrás, sobre la tierra,
Troparios
por la elección de los apóstoles que
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
Te siguieron. Pues por la conducta
Oh Maestro, cuando los discí-
divina se elevaron encima de este
pulos, oyeron del Padre el testimo-
mundo; haciéndose dignos enton-
nio para Ti, mas incapaz de mirar ces de contemplar Tu Manifesta-
la luz de Tu Rostro, siendo más su-
ción Divina, y cantaron: “Oh
blime que toda visión humana, ca-
pueblos, exaltad a Cristo por todos
yeron a tierra y con temor cantaron: los siglos”.
“Bendecid, Oh Sacerdotes; y voso-
tros, Oh pueblos, exaltad a Cristo
KATAVASÍA OCTAVA
Alabemos, bendigamos y adoremos al
por todos los siglos”.
Señor.
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
“Oh jóvenes, que igualan en núme-
Oh Bendito Soberano, Tú eres, ro a la Trinidad, bendecid al Padre
el Rey más hermoso de todos los el Dios y Creador; Alabad al Verbo
reyes y Señor de todos los sobera-
que descendió y cambió el fuego en
nos; Tú que moras en la luz inacce-
rocío; Y exaltad más al Espíritu
sible. Los discípulos, Maravillados
Santísimo que a todos, otorga la
de Ti, exclamaron: “Oh jóvenes,
vida por todos los siglos.”
bendecid; Oh Sacerdotes alabad; y
Sacerdote o Diácono:
vosotros Oh pueblos exaltad a Cris-
A la Madre de Dios, Madre de la Luz, con
to por todos los siglos”.
himnos albemos magnificándola.
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
LA NOVENA ODA
Oh Cristo, como eres el Sobe-
Será de los dos Cánones, y no serán cantadas las
rano del cielo y el Señor de la tierra,
Magnificaciones y “Oh más Honorable que los
y tiene dominio sobre las cosas de-
querubines...” Pero sí, antes del Irmo y de cada
uno de los Troparios se canta:
bajo de la tierra; He aquí se presen-
“Magnifica, Oh alma mía, al Señor que
taron, de pie, ante Ti: Los apóstoles
fue transfigurado en el Tabor.”
de la tierra, y Elías el Tesbita del
PRIMER CANON - Irmo
cielo, y Moisés de los muertos, can-
Tu Alumbramiento, Oh Madre
tando al unísono: “Oh pueblos, de Dios, ha sido ajeno a la corrup-
exaltad a Cristo por todos los si-
ción; Porque Dios brotó de Tu vien-
glos”.
tre, revestido de un cuerpo,
“¡Gloria a Ti, Oh Dios, gloria a Ti!”
apareció sobre la tierra y anduvo

19

LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

entre los hombres; Por consiguien-
inefable de Dios; ¡Cómo es que el
te, todos nosotros Te magnifica-
Altísimo, por su propia voluntad,
mos.
se humilló hasta la carne, hacién-
Troparios
dose hombre en un vientre virgi-
“Magnifica, Oh alma mía, al Señor...”
nal! Por consiguiente, nosotros los
Habiendo sido súbitamente fieles, magnificamos la Purísima
iluminados por los arroyos de la Madre de Dios.
luz, los discípulos se miraban unos
Troparios
a otros con temor, y cayeron a tie-
“Magnifica, Oh alma mía, al Señor...”
rra, cara hacia abajo; Adorándote, a
Oh Cristo, brillaste inefable-
Ti, Oh Soberano de todos.
mente para los Apóstoles y para
“Magnifica, Oh alma mía, al Señor...”
Moisés junto a Elías, en el Monte
La nube dio una voz de trueno, Tabor; a fin de revelar con claridad
conmovida por Dios, para confir-
Tu Segunda Venida Misteriosa; Y
mar la maravilla, porque el Padre Cómo es que el Dios Altísimo se
de las Luces había aclamado a los manifiesta estando de pie en medio
apóstoles: “Este es Mi Hijo Amado, de los dioses; Por tanto, todos noso-
escuchadle”.
tros, a Ti magnificamos.
“Magnifica, Oh alma mía, al Señor...”
“Magnifica, Oh alma mía, al Señor...”
Cuando los servidores del Ver-
¡Venid, pueblos todos, escu-
bo, miraron las cosas Maravillosas chadme! Subamos al Monte Sagra-
extrañas y oyeron la voz del Padre do Celestial, y estemos
en el Tabor, exclamaron diciendo: espiritualmente en la ciudad del
“Éste es nuestro Salvador, la sus-
Dios Vivo. Y contemplemos con la
tancia de la antigua imagen.”
mente la Divinidad inmaterial; La
“Magnifica, Oh alma mía, al Señor...”
Divinidad del Padre y del Espíritu,
Oh Verbo, eh Hijo Inalterable, resplandeciendo en el Hijo Unigé-
la Imagen Verdadera del Altísimo, nito.
Su Sello Inconmovible, Su Sabidu-
“Magnifica, Oh alma mía, al Señor...”
ría, Su Brazo Derecho y Su Poder.
Con Tu Anhelo me cautivaste,
A Ti alabamos junto al Padre y al Oh Cristo, y me transformaste con
Espíritu.
Tu Amor Divino. Por lo tanto, que-
ma mis pecados con el fuego del
SEGUNDO CANON
Espíritu, y hazme digno de llenar-
Irmo
Todo oído tembló con temor a me con Tu Deleite; para que go-
oír hablar de la condescendencia zando de ambos estados,

20

LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

magnifique Tu Venida, Oh Bonda-
EL AÍNOS
doso.
“Las Alabanzas”
Serán retenidos Cuatro Estíjos y serán cantadas
KATAVASÍA NOVENA
las siguientes tres Estijéras Prosomias,
“Magnifica, Oh alma mía, al Señor que
repitiendo la primera, en el Cuarto Tono:
fue transfigurado en el Tabor.”
¡Todo cuanto respira alabe al Señor!
“Tú eres el paraíso místico, Oh
(Salmo 150: 6)
¡Alabad al Señor desde los cielos;
Madre de Dios; Porque sin
Alabadle en las alturas!
labranza diste a luz a Cristo; De
(Salmo 148: 1)
quien fue plantado en la tierra el
A Ti se debe la alabanza, Oh Dios.
árbol vivificador de la Cruz;
(Salmo 64 ‘65’ 2)
Por consiguiente, al adorarlo le
Alabadle, vosotros todos sus ánge-
exaltamos y a Ti magnificamos.”
les; Alabadle, vosotros todos sus
Otra
poderes. (Salmo 148: 2)
“Hoy, la muerte que gobernó a la
A Ti es debida la alabanza, Oh
humanidad, por comer del árbol, ha
Dios.
(Salmo 65: 1)
quedado sin efecto por medio de la
Cruz. Porque la maldición de
Esta Gloria es para todos sus justos.
nuestra primera madre y de toda la
Alabad a Dios en Su santuario; Alabadle
humanidad, ha sido anulada por el
en la extensión de Su fortaleza. (Salmo 150:
1)
fruto de la Madre de Dios
Alabadle por sus proezas; Alabadle con-
Purísima, a Quien todos los
forme a la muchedumbre de Su grandeza.
poderes celestiales magnifican.”
(Ídem. 2)
Alabadle a son de bocina; Alabadle con
La Pequeña Letanía
salterio y arpa. (Ídem. 3)
Y después de la exclamación del Sacerdote:
“Porque a Ti alaban todos lo poderes...”
Alabadle con adufe y flauta; Alabadle
Coro:
con cuerdas y órgano. (Ídem. 4)
Santo es el Señor, nuestro Dios. (Tres ve-
Antes de Tu Crucifixión pre-
ces)
ciosa y Tu Pasión, llevaste contigo a
EXAPOSTELARIÓN
aquellos, que habías escogido espe-
Oh Verbo y Luz Inalterable, cialmente entre Tus puros discípu-
Luz del Padre No-engendrada; los; Y has subido con ellos, Oh
Hoy, por Tu Luz que se manifestó Maestro, al Monte Tabor, querien-
en el Tabor, hemos visto al Padre do mostrarles Tu Gloria. Y cuando
como Luz y al Espíritu como Luz, Te vieron transfigurado y brillando
iluminando a toda la creación.
más resplandeciente que el sol, se
Se repite - Tres Veces
postraron rostro en tierra, asom-

21

LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

brados fuertemente de la maravilla veló claramente, siendo el Hijo
de Tu Poder, y exclamaron: “Oh Amado, que Lo igualas en la Esen-
Cristo, Tú eres la luz eterna y el bri-
cia y en el Trono. Por esto Pedro,
llo del Padre; Aunque Tú has sido Maravillado clamó, sin saber lo que
visto hecho carne por Tu propia decía: “Es bueno estar aquí”, Oh
Voluntad, sin padecer cambio al-
Misericordioso Benefactor nuestro.
guno.
Gloria... Ahora... - Por Leonidas
Alabadle con címbalos resonantes: Ala-
Octavo Tono
badle con címbalos de júbilo. Todo lo que
Cristo llevó aparte, a un monte
respira alabe al Señor. (Ídem. 5 - 6)
alto, a Pedro, Santiago y Juan y se
Se repite
transfiguró ante ellos. Su Rostro
“Antes de Tu Crucifixión preciosa
brilló como el sol y Sus vestidura se
y Tu Pasión,...”
hicieron blancas como la luz. Y allí
Levántate, Oh Señor Dios, alza Tu mano;
aparecieron Moisés y Elías que con-
No Te olvides de los humildes.
versaban con Él; Y una nube lumi-
(Salmo 10: 12)
Oh Tú, que desde la eternidad nosa los cubrió; Y he Aquí, una voz
eres el Verbo Dios, que Te vestiste fuera de la nube, diciendo: “Éste es
de luz como con un manto; Y que te Mi Hijo amado, en quien me com-
has transfigurado ante Tus discípu-
plazco, escuchadle”.
los, brillando más resplandeciente
LA DOXOLOGÍA
que el sol. Moisés y Elías estaban
de pie a Tu Lado, afirmando clara-
Tropario - Tono Séptimo
Cuando Te transfiguraste, Oh
mente que eres el Señor de los vi-
Cristo Dios, en la montaña; Reve-
vos y muertos; Glorificando Tu laste Tu Gloria a los discípulos se-
Dispensación Inefable, Tu Compa-
gún ellos pudieron contemplar.
sión y Tu Gran Condescendencia, Haz resplandecer Tu Luz Eterna
por la que has salvado al mundo sobre nosotros pecadores; Por las
perdido por el pecado.
intercesiones de la Madre de Dios;
Yo Te alabaré, Oh Señor, con todo mi
¡Tú que otorgas la luz, gloria a ti!
corazón; Contaré todas tus maravillas.
(Salmo 9: 1)
Oh Señor, Tú que naciste de la
APÓLISIS
nube de la Virgen y te hiciste carne,

Te transfiguraste en el Monte Ta-
bor, envolviéndote con una nube
DIVINA LITURGIA
luminosa; Y la voz del Padre, en
presencia de los discípulos, Te re-
LAS ANTÍFONAS
PRIMERA ANTÍFONA - Tono Segundo

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LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

(Stíjo 1) Grande es el Señor y muy
Gloria... Ahora... Amén.
digno de loa en la ciudad de
“Oh Verbo de Dios, Hijo Unigénito...”
nuestro Dios, en Su Monte Santo.
TERCERA ANTÍFONA - Tono Séptimo
(Salmo 47 “48”: 1)
Por las Oraciones de la Madre de Dios,
(Stíjo 1) El Amor del Señor por siem-
Oh Salvador, Sálvanos.
pre cantaré. (Salmo 88 “89”: 2)
Que será repetido detrás de los siguientes Stíjos
Tropario
“Cuando Te transfiguraste,…”
(Stíjo 2) Tú que afirmas los montes
Que será repetido detrás de los siguientes Stíjos
con Tu Fuerza, de potencia ceñido.
Y acallas el estruendo de los mares,
(Stíjo 2) Los cielos celebran Tus
Maravillas, Oh Señor, y Tu Lealtad
el estruendo de sus olas. (Salmo 64
en la asamblea de los santos.
“65”: 7-8)
(Ídem: 6)
(Stíjo 3) Vestido de esplendor y ma-
(Stíjo 3) Dichoso el pueblo que la
jestad, arropado de luz como de un
aclamación conoce. (Ídem: 16)
manto. (Salmo 103 “104”: 1 - 2)
(Stíjo 4) A la Luz de Tu Rostro
(Stíjo 4) Los montes gritan de alegría,
caminan, Oh Señor. En Tu Nombre
ante el Rostro del Señor, pue viene
se alegran todo el día, en Tu
a juzgar a la tierra. (Salmo 97 “98”: 8 - 9)
Justicia se entusiasman. (Ídem: 16 - 17)
Gloria... Ahora... Amén.

“Por las Oraciones de la Madre...”
Nótese que en el uso Eslavo las Antífonas tienen
otros Stíjos, como sigue:
SEGUNDA ANTÍFONA - Tono Segundo
PRIMERA ANTÍFONA - Tono Segundo
(Stíjo 1) Su fundación sobre los
(Stíjo 1) Aclamad a Dios, la tierra
santos montes. (Salmo 86 “87”: 1)
toda, Salmodias a la Gloria de Su
Sálvanos, Oh Hijo de Dios, Tú que Te
Nombre, rendid el honor de Su
transfiguraste en el Monte Tabor, para
Alabanza.
nuestra salvación, a nosotros que Te
(Salmo 65 “66”: 1 - 2)
cantamos: Aleluya.
Por las Oraciones de la Madre de Dios,
Que será repetido detrás de los siguientes Stíjos
Oh Salvador, Sálvanos.
(Stíjo 2) El Señor ama las puertas de
Que será repetido detrás de los siguientes Stíjos
Sión, más que todas las moradas de
(Stíjo 2) ¡Voz de Tu Trueno en torbe-
Jacob. (Ídem 2)
llino! Tus relámpagos alumbraban
el orbe, la tierra se estremecía y
(Stíjo 3) Glorias se dicen de ti,
Ciudad de Dios.
retemblaba. (Salmo 76 “77”: 19)
(Ídem 3)
(Stíjo 4) Pero de Sión se ha de decir:
(Stíjo 3) Vestido de esplendor y ma-
Todos han nacido en ella, y quien
jestad, arropado de luz como de un
la fundó es el Propio Altísimo.
manto. (Salmo 103 “104”: 1 - 2)
(Ídem
5)

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LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

Gloria... Ahora... Amén.
(Stíjo 4) ¿Quién subirá al Monte del
“Por las Oraciones de la Madre...”
Señor? ¿Quién podrá estar en Su
SEGUNDA ANTÍFONA - Tono Segundo
Recinto Santo? (Salmo 23 ’24’: 3)
(Stíjo 1) El monte Sión, confín del

Norte, la ciudad del Gran Rey.
EL ISODÓN
(Salmo 47 “48”: 3)
Tono Cuarto
Sálvanos, Oh Hijo de Dios, Tú que Te
El Tabor y el Hermón exultan en
transfiguraste en el Monte Tabor, para
Tu Nombre. (Salmo 88 ’89’: 13)
nuestra salvación, a nosotros que Te
Sálvanos, Oh Hijo de Dios, Tú que Te
cantamos: Aleluya.
transfiguraste en el Monte Tabor, para
Que será repetido detrás de los siguientes Stíjos
nuestra salvación, a nosotros que Te can-
tamos: Aleluya.
(Stíjo 2) Los llevó a Su Término
Santo, a este Monte que Su Diestra
Nótese que el Tipikón menciona otra versión
Griega que algunas veces es usada:
conquistó. (Salmo 77 “78”: 54)
Porque en Ti está la fuente de la
(Stíjo 3) Eligió a la tribu de Judá, el
Vida, Y en Tu Luz vemos la luz.
monte Sión al cual amaba.
(Salmo 35 “36” : 10)
Construyó como las alturas del
“Sálvanos, Oh Hijo de Dios, Tú que Te
cielo Su Santuario.
transfiguraste...”
(Ídem.: 68 – 89)
Gloria... Ahora... Amén.
Y en el uso Eslavo
“Oh Verbo de Dios, Hijo Unigénito...”
Oh Señor, envía Tu Luz y Tu
T
Verdad Ellas me guíen, y me
ERCERA ANTÍFONA - Tono Séptimo
conduzcan a Tu Monte Santo.
(Stíjo 1) Los que confían en el Señor
(Salmo 43: 3)
son como el Monte Sión, que es in-
“Sálvanos, Oh Hijo de Dios, Tú que Te
conmovible, estable para siempre.
transfiguraste...”
Tropario
Luego, en el uso eslavo así como en el griego, será
“Cuando Te transfiguraste,…”
cantado el Tropario
Que será repetido detrás de los siguientes Stíjos
Tropario - Tono Séptimo
(Stíjo 2) Así como Jerusalén de
Cuando Te transfiguraste, Oh
montes rodeada, así el Señor rodea Cristo Dios, en la montaña; Reve-
a su pueblo, desde ahora y por
laste Tu Gloria a los discípulos se-
siempre. (Ídem.: 2)
gún ellos pudieron contemplar.
Haz resplandecer Tu Luz Eterna
(Stíjo 3) Señor, ¿Quién morará en Tu
Tienda? ¿Quién habitará en Tu
sobre nosotros pecadores; Por las
Santo Monte?
intercesiones de la Madre de Dios;
(Salmo 14 ’15’: 1)
¡Tú que otorgas la luz, gloria a ti!
(Se repite tres veces)
Kontakión - Tono Séptimo

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LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

Te transfiguraste, Oh Cristo según me lo ha manifestado nues-
Dios, en la montaña; y Tus discípu-
tro Señor Jesucristo. 15Pero pondré
los contemplaron Tu Gloria, según empeño en que, en todo momento,
ellos pudieron soportar. Para que después de mi partida, podíais re-
cuando te vieran crucificado, re-
cordar estas cosas. 16Os hemos da-
cordaran que Tu Pasión fue volun-
do a conocer el Poder y la Venida
taria y proclamaran al mundo, que de nuestro Señor Jesucristo, no si-
Tu eres verdaderamente el Res-
guiendo fábulas ingeniosas, sino
plandor del Padre.
después de haber visto con nues-
tros propios ojos su majestad.
EL TRISAGIO
17Porque recibió de Dios Padre
LAS LECTURAS SAGRADAS
honor y gloria, cuando la Sublime
EL PROKÍMENON
Gloria le dirigió esta voz: “Este es
Tono Cuarto
mi Hijo muy amado, en quien me
¡Cuán numerosa Tus Obras, Oh Se-
complazco”. 18Nosotros mismos
ñor! Todas las has hecho con sabi-
escuchamos esta voz, venida del
duría. (Salmo 103 “104”: 24)
cielo, estando con Él en el Monte
(Stíjo) ¡Alma mía, Bendice al Señor!
Santo. 19Y así se nos hace más firme
¡Señor, Dios mío, Qué Grande eres! la palabra de los profetas, a la cual
(Ídem : 1)
hacéis bien en prestar atención,
LA EPÍSTOLA
como a lámpara que luce en lugar
Lectura de la Segunda Carta Católica del
Apóstol San Pedro
oscuro, hasta que despunte el día y
[IIª Pedro 1: 10 - 19]
se levante en vuestros corazones. el
10Por tanto, hermanos, poned lucero de la mañana.
el mayor empeño en afianzar vues-
ALELUYA
tra vocación y vuestra elección.
En el uso Griego - Tono Primero
Obrando así, nunca caeréis. 11Pues
Los cielos celebran, Señor, Tus
así se os dará amplia entrada en el
Maravillas, (Salmo 88 “89”: 6)
Reino Eterno de nuestro Señor y (Stíjo) Dios Temible en el consejo de
Salvador Jesucristo. 12Por esto, esta-
los santos. (Ídem.: 8)
ré siempre recordándoos estas co-
Pero en el uso Eslavo y en algunos libros griegos
sas, aunque ya las sepáis, y estéis
firmes en la verdad que poseéis.
Tono Octavo
Tuyo es el cielo, tuya también la
13Me Parece justo, mientras me en-
tierra.
cuentro en esta tienda, estimularos
(Salmo 88 “89”: 12)
con el recuerdo,
(Stíjo) Dichoso es el hombre que la
14Sabiendo que
aclamación conoce.
pronto tendré que dejar mi tienda,
(Ídem.: 16)

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LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

Lectura del Santo Evangelio según Mateo
“Magnifica, Oh alma mía, al Señor que
[Mateo 17: 1 - 9]
fue transfigurado en el Tabor.”
En aquellos tiempo, 1Toma Je-
Ahora se ha oído lo que jamás
sús consigo a Pedro, a Santiago y a ha sido oído. Porque el Hijo que sin
su hermano Juan, y los lleva aparte, padre ha venido de la Virgen, reci-
a un monte alto; 2Y se transfiguró be gloriosamente el testimonio por
delante de ellos; Su Rostro se puso la voz del Padre: Que Él es Dios y
brillante como el sol y Sus Vestidos hombre por todos los siglos.
se volvieron blancos como la luz.
Otros dicen la Novena Oda del Primer canon
3En esto, se les aparecieron Moisés
como sigue
y Elías que conversaban con Él. “Magnifica, Oh alma mía, al Señor que
4Tomando Pedro la palabra, dijo a
fue transfigurado en el Tabor.”
Jesús: “Señor, bueno es estarnos
Tu Alumbramiento, Oh Madre
aquí. Si quieres, haré aquí tres tien-
de Dios, ha sido ajeno a la corrup-
das, una para Ti, otra para Moisés y ción; Porque Dios brotó de Tu vien-
otra para Elías”. 5Todavía estaba tre, revestido de un cuerpo,
hablando, cuando una nube lumi-
apareció sobre la tierra y anduvo
nosa los cubrió con su sombra y de entre los hombres; Por consiguien-
la nube salía una voz que decía: te, todos nosotros Te magnifica-
“Este es mi Hijo Amado, en quien mos.
me complazco; Escuchadle”. 6Al oír
EL QUENENIKÓN
esto los discípulos cayeron rostro
“Cántico de la Comunión”
en tierra llenos de miedo. 7Mas Je-
Caminaremos, a la Luz de Tu Ros-
sús, acercándose a ellos, los tocó y tro, Oh Señor, y en Tu Nombre nos
dijo: “Levantaos, no tengáis mie-
alegramos todo el día. Aleluya.
do”. 8Ellos alzaron sus ojos y ya no
(Salmo 88 “89”: 16 - 17)
vieron a nadie más que a Jesús solo.
En lugar de “Hemos visto la verdadera
9Y cuando bajaban del monte, Jesús
Luz,…” será cantado el Tropario.
les ordenó: “No contéis a nadie la
Nótese que:
visión, hasta que el Hijo del Hom-
bre haya resucitado de entre los En este día particular, ha sido de costumbre traer
el fruto de la vid - Uvas - al Templo, que será
muertos”.
puesto en una bandeja y sobre una mesa en el
centro, frente a la Puerta Real, y bendecido por el
Nótese que, según el Tipikón, después de
que preside al final de la Divina Liturgia.
“Principalmente...”, en lugar de “Verdadera-
mente es digno y debido…”, será cantado el
Según la Tradición Griega
Tercer Tropario de la Séptima Oda, con la
- Roguemos al Señor
magnificación, como sigue:
- Señor, ten piedad

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LA SANTA TRANSFIGURACIÓN DE NUESTRO SEÑOR, DIOS Y SALVADOR JESUCRISTO

Y la siguiente oración:
nos de la Gracia que ninguno pue-
Bendice, Oh Señor, Este fruto de quitárnoslos. Por las
nuevo de la vid que, por la templa-
intercesiones de nuestra Purísima
da estación, la caída de lluvia, y los Soberana Señora, la Madre de Dios
vientos tranquilos, ha sido de Tu y Siempre Virgen María; Y de todos
agrado que llegara a la madurez; Y los santos que te han complacido
que sea para nosotros, los que com-
desde el inicio de los siglos. Porque
partimos este fruto de la vid, causa Tu eres un Dios Bondadoso y
de la alegría; Y para aquéllos los Amante de la Humanidad, y a Ti
que lo ofrecen, perdón de los peca-
glorificamos, Oh Padre sin princi-
dos, por medio del Cuerpo de Cris-
pio, con Tu Hijo Unigénito y Tu
to y Su Sangre Purísima; Con Santísimo, Bueno y Vivificador Es-
Quién eres bendito, junto con Tu píritu, ahora y siempre y por los
Santísimo, Bueno y Vivificador siglos de los siglos. Amén.
Espíritu, Ahora y siempre y por los
siglos de los siglos. Amén.
Las uvas serán distribuidas al final de la
Divina Liturgia, junto al Pan Bendito:
Según la Tradición Eslava
‘El Antidoron’
- Roguemos al Señor
- Señor, ten piedad
APÓLISIS
Y la siguiente oración:
Oh Cristo nuestro Dios Verda-
Oh Dios Salvador nuestro, Tú dero, que fuiste transfigurado con
que fuiste complacido en llamar a gloria en el Monte Tabor, ante Tus
Tu Hijo Unigénito, nuestro Señor, santos Apóstoles, para nuestra sal-
Dios y Salvador Jesucristo: La Vid; vación, por las intercesiones de Tu
Y por Él nos has concedido el fruto purísima madre...
de la inmortalidad; Bendice ahora,
Tú Mismo esto fruto de la vid aquí

presente; Y haznos, a nosotros Tus
La Despedida de la Fiesta de la Santa
siervos, que participamos de él,
Transfiguración
partícipes de la Verdadera Vid. Será el día 13; En este día todo el oficio será para
Conserva nuestras vidas sin daño la fiesta salvo las Lecturas, el Litín, el Poliólion, el
evangelio de los Maitines y la Bendición de las
en esta vida; y otórganos la paz,
uvas al final de la Divina Liturgia.
adornándonos con los dones eter-





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