EL TRIÓDION - 3ER. DOMINGO - DOMINGO DE LA ABSTINENCIA DE LA CARNE
TERCER DOMINGO DEL TRIÓDION
DOMINGO DE LA ABSTINENCIA DE LA CARNE
“DOMINGO DEL JUICIO”
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EL TRIÓDION - 3ER. DOMINGO - DOMINGO DE LA ABSTINENCIA DE LA CARNE
so Compasivo, apiádate de noso-
GRANDES VÍSPERAS
tros, los que Te alabamos, Oh
Sobre “Oh Señor a Ti he clamado...” serán
Único Misericordiosísimo.
retenidos Diez Stíjos y serán cantadas Seis Esti-
(Stíjo) ¡Alabad al Señor, todas las
jéras para el tono de la Resurrección y los siguien-
naciones; Celebradle, pueblos todos!
tes Cuatro Prosómios del Triódion
(Salmo 116 ‘117’: 1)
Tono Sexto
Las trompetas sonarán, los se-
(Stíjo) Más que los centinelas la mañana;
pulcros se vaciarán y toda la natu-
Más que los vigilantes la mañana;
raleza de los hombres se levantará
Aguarda Israel al Señor.
temblando. Pues, los que hayan
(Salmo 129 ‘130’: 6 - 7)
hecho el bien, se apresurarán con
¡Oh Justo Juez! Cuando vengas
a ejecutar un juicio justo, entonces, alegría, esperando recibir la re-
Te sentarás en el Trono de Tu Glo-
compensa; Y los hallados culpables,
ria; El río de fuego corre exten-
temblarán grandemente, y estreme-
diéndose fluyendo ante Tu Estrado ciéndose llorarán; Aislados, pues,
espantosamente, asombrando a to-
de los elegidos, serán enviados al
dos; Los poderes celestiales compa-
tormento. Por eso, Oh Señor de la
recen ante Ti con temor; Los gloria, apiádate de nosotros y haz-
hombres serán juzgados con estre-
nos dignos de ser contados entre
mecimiento, cada uno de acuerdo los que Te aman, porque eres Bon-
con sus hechos. Entonces, ten pie-
dadoso.
dad de nosotros, Oh Cristo, y cuén-
(Stíjo) Porque es fuerte Su Amor hacia
tanos entre los salvados, a nosotros
nosotros, y la verdad del Señor dura
para siempre.
que Te suplicamos, porque eres
(Salmo 116 ‘117’: 1)
Al recordarme, Oh Bondadosí-
Compasivo.
simo, del fuego eterno, de la oscu-
(Stíjo) Porque con el Señor está el Amor,
ridad máxima, del abismo, del
junto a Él abundancia de rescate;
Él rescatará a Israel de todas sus culpas.
gusano penoso, del crujir de dien-
(Salmo 129 ‘130’: 7 - 8)
tes, del dolor incesante que perte-
Los libros serán abierto; Los nece a los que, voluntariamente y
hechos serán revelados ante los con mala intención, han cometido
hombres y ante el Trono Temible; numerosos pecados y Te irritaron;
El valle del gemido resonará con Lloro y sollozo, yo miserable, que
un terrible crujir de dientes, viendo soy el primero de ellos. Por eso, Oh
a todos los pecadores, siendo en-
Justo Juez, sálvame por Tu Miseri-
viados, por Tu Sentencia Justa, a los cordia, porque eres Compasivo.
castigos eternos, llorando en vano.
Gloria... Tono Octavo
Por eso, Te rogamos, Oh Bondado-
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EL TRIÓDION - 3ER. DOMINGO - DOMINGO DE LA ABSTINENCIA DE LA CARNE
¡Qué temible es! Cuando los mos y visitemos a los presos.
ángeles, estén de pie con temor y el Entonces, nos dirá Aquél que está
río de fuego corre extendiéndose por juzgar a toda la tierra: “Venid,
fluyendo; Cuando los tronos estén benditos de Mi Padre, heredad el
puestos, los libros abiertos y Dios Reino que os ha sido preparado.”
sentado para juzgar! ¿Qué haremos
Ahora... Para la Soberana
entonces, nosotros los hombres que
Nosotros, todos los terrenales,
nos hemos hallado bajo la sentencia nos refugiamos en Tu Protección,
a causa de los numerosos pecados; Oh Soberana; Y hacia Ti exclama-
Y cuando Le oigamos convocando, mos diciendo: “Líbranos de nues-
a Su Reino, a los benditos de Su tros pecados innumerables, Oh
Padre y enviando a los pecadores al Madre de Dios, Esperanza nuestra,
tormento? ¿Quién soportará, en-
y salva nuestras almas.”
tonces, aquel terrible fallo final?
Por eso, apresúrate a mi con el
LAS APOSTÍJAS
arrepentimiento, antes que yo pe-
Las Estijéras son del Tono de la Resurrección
reciera, Oh Salvador, Amante de la
Gloria... - Tono Octavo
humanidad y Único Rey de los si-
¡Ay de ti, alma oscurecida!
glos y ten piedad de mi.
¿Cuándo cesarás de hacer malda-
Ahora... Para la Soberana
des? ¿Hasta cuándo yacerás en la
Del Tono de la Resurrección
pereza? ¿Por qué no piensas en la
(Ver Octoijós)
hora temible de la Muerte? ¿Por
EL ISODÓN
qué no tiemblas, enteramente, ante
“Oh Luz Radiante...”
el Trono Temible del Salvador?
“El Prokímenon”, “La Ektanía” o la Súplica
¿Con qué te ocultarás o qué contes-
Ferviente, “Haznos dignos, Señor,...” y “Com-
tarás, cuando tus hechos se levan-
pletemos nuestras suplicas...”
(Ver página primera)
ten para reprenderte y tus obras
para reprocharte? ¡He aquí, la hora
EL LITÍN
ha llegado, alma mía! Por eso,
Gloria... Idiomálata - Tono Séptimo
apresúrate antes que se haga tarde,
¡Venid, fieles, los que conoce-
y con fe exclama: “He pecado co-
mos los mandamientos del Señor, ntra Ti, Señor, he pecado; Pero co-
regocijémonos! Alimentemos, pues, nozco Tu Compasión, no me
a los hambrientos, demos de beber apartes de estar a Tu Diestra, Oh
a los sedientos, revestimos a los Bondadoso Pastor, Amante de la
desnudos, hospedamos a los ex-
humanidad, por la multitud de Tus
tranje-ros, atendemos a los enfer-
Misericordias.”
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EL TRIÓDION - 3ER. DOMINGO - DOMINGO DE LA ABSTINENCIA DE LA CARNE
Ahora... - Tono Octavo de la Resurrección
purifícame por la compasión de
Acepta las súplicas de Tus sier-
Tus Piedades.
vos, Oh Madre de Dios Altísimo;
Ahora... - Mismo Tono
La Virgen Exenta de toda mancha,
¡Facilítame los caminos de la
que no conoció novio alguno. Tú salvación, Oh Madre de Dios! Por-
que, inefablemente, has concebido que, he profanado mi alma con pe-
a Dios en la carne. Intercede, Tú cados horrendos y he consumido
que respondes a nuestros ruegos y toda mi vida con la pereza. Pero,
concedes a todos la purificación de por Tus Intercesiones, purifícame
las transgresiones, por la salvación de toda impureza.
de todos nosotros.
Tono Sexto
LOS TROPARIOS
Tenme piedad, Oh Dios, según
1- Del Tono de la Resurrección.
Tu Amor, por Tu inmensa Ternura
2- Gloria - (Se repite)
borra mi delito.
3- Ahora… - Para la Soberana
Y directamente
Cuando medito en las multi-
APÓLISIS
tudes de mis obras malas; tiemblo,
La Conclusión Común del Oficio de los domingos
(Ver el Oficio de las Vísperas)
yo miserable, considerando el te-
mible Día del Juicio. Pero confian-
do en la ternura de Tu Compasión,
como David a Ti exclamo: “Tenme
LOS MAITINES
piedad, Oh Dios, según Tu Gran
Después de los Seis Salmos Matutinos, y sobre
Misericordia.”
“Dios es el Señor...” serán cantados los mismos
Troparios como en las Vísperas.
EL CANON
Las Katísmatas, las Evlogitarias, el Ipakoí,
Primero de la Resurrección, La Cruz, la Soberana
el Anávtemi, el Prokímenon y el Evangelio
y luego del Triódion de Ocho
Matutino de la Eotina. “Como hemos visto
Por Teodoro ‘El Estudita’ - Tono Sexto
la Resurrección de Cristo...” y el Salmo 50, y
directamente:
ODA PRIMERA
Gloria... - Tono Octavo
Al acordarme del incompren-
¡Ábreme las puertas del arre-
sible Día de Tu Temible Venida;
pentimiento, Oh Dador de la vida! Temo y tiemblo, premeditándolo,
Porque, de madrugada, mi alma se pues en él, Te sentarás para juzgar
apresura hacia el Templo de Tu a los vivos y muertos, Oh Dios To-
Santidad, acercándose en el templo dopoderoso.
de mi cuerpo, enteramente profa-
Cuando vengas, Oh Dios, con
nado. Pero, como eres Compasivo, millares y diez millares de arcánge-
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les celestiales, hazme digno, Oh ¡Éste, pues, Le engendró el Padre
Cristo, a mí miserable, de recibirte sin madre y es una extraña maravi-
en las nubes.
lla! Porque Tú, Oh Purísima, diste a
Ven, Oh alma, imagina aquel luz Dios y Hombre a la vez.
día y aquella hora; Cuando aparez-
KATAVASÍA PRIMERA
ca Dios anunciándose, y llora la-
“Ayuda y refugio me ha sido la
mentando, para que te encuentre
salvación. Éste es mi Dios, y le
pura en la hora del examen.
glorificaré, Dios de mi padre y le
El inextinguible ardor del in-
exaltaré, porque, con gloria, Él ha
fierno, el gusano amargo y crujir de
sido glorificado.”
diente, me hacen temblar y me mo-
lestan. Pero Tú, Oh Cristo, aparta la
ODA TERCERA
vista perdonando y cuéntame entre
Cuando Dios vendrá ¿Quién
Tus elegidos.
soportará Su Temor? o ¿Quién apa-
Quizás escucharía, yo misera-
recerá ante Su Cara? Pero tú, Oh
ble, Tu Tono dulce, convocando a alma, esté lista a recibirle.
Tus Santos al gozo y la alegría; Y
Anticipémonos y lloremos; Y
obtendría gozar del Indescriptible reconciliémonos con nuestro Dios
Reino Celestial.
antes del fin; Porque el juicio es
No entre en juicio conmigo, temible, en el cual estaremos de pie
haciendo presentes mis obras y encorvando los cuellos.
examinando mis pasiones, buscan-
¡Tenme piedad! Oh Señor, a Ti
do una respuesta por ellas; Sino, exclamo: “Tenme piedad, cuando
por Tu Compasión, aparta la vista vengas con Tus Ángeles a juzgar
de mis malas obras y sálvame, Oh cada uno acorde a sus obras.”
Todopoderoso.
¿Cómo aguantaría la ira de Tu
Gloria…
Insoportable Juicio, Oh Señor; Por-
Oh Uno en Tres Personas, de que yo había desobedecido Tu Or-
Perfecta Soberanía, Señor de todos den? Pero Tú, en la hora del juicio,
y el principio de todo fin; Sálvanos compadécete y tenme piedad.
a todos, Oh Padre, Hijo y Espíritu
¡Alma miserable! Regresa y
Santo.
suspira, antes del final y del ocaso
Ahora… - Para la Soberana
de tu vida; Y antes de que el Señor
¿Quién es aquél que engendró cerrara ante ti la puerta de la cá-
sin simiente según la ley paterna? mara nupcial.
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Oh Señor, he pecado con lo Tu Vientre al Hacedor de todos, Tu
que ninguno de los hombres ha Dios y Creador; Mas sin corrupción
cometido; Y transgredí mas que diste a luz, al que nosotros glorifi-
todo hombre. Pero Tú, sé compasi-
camos. Te alabamos, pues, a Ti,
vo conmigo antes del juicio, Oh como eres Palacio del Rey de la
Amante de la humanidad.
Gloria y la Redención del mundo.
Gloria…
OTRA KATÍSMATA - Tono Sexto
Oh Trinidad, Simple, No Crea-
Me recuerdo del Día Terrible y
da; La Naturaleza Eterna, la alaba-
lloro mis malas obras; ¿Cómo res-
da en Tres Personas; Sálvanos a ponderé al Rey Inmortal? y ¿Con
nosotros que con fe adoramos Tu cuál privilegio miraré al Juez, yo
Poder.
pródigo? Pero Tú, tenme piedad,
Ahora… - Para la Soberana
Oh Padre Compasivo, Hijo Unigé-
Oh Purísima, dando a luz, Tu nito y Espíritu Santo.
habías brotado al Verbo Vivo,
Gloria… - Mismo Tono
cuando se encarnó en Tu Vientre
Si sentares a ejecutar un juicio
sin sufrir cambio; ¡Gloria, a Tu justo, Oh Compasivo, en el lugar
Alumbramiento, Oh Madre de que has preparado en el valle de
Dios!
lamentos; No aclara mis pecados y
KATAVASÍA TERCERA
no me avergüences delante de los
“Afirma, Oh Señor, mi corazón
Ángeles, sino compadécete de mí,
vacilante sobre la roca de Tus
Dios mío y tenme piedad.
Mandamientos, Porque, Sólo Tú,
Ahora…- Para la Soberana - Mismo Tono
eres Santo y Señor.”
Oh Bondadosa Virgen Madre
K
de Dios, Esperanza del mundo; Su-
ATÍSMATA - Tono Primero
Temible es Tu Trono, Justo es plico por Tus Terribles y Únicas
Tu juicio y malas son mis obras. Intercesiones. Apiádate, pues, de
Pero Tú, Oh Misericordioso, alcán-
un pueblo rodeado de muchos y
zame, sálvame y líbrame del tor-
ruega a Dios Misericordioso, que
mento y rescátame del grupo del salve nuestras almas de toda
ardor y hazme digno de parar a Tu amenaza,
Diestra, Oh Justo Juez.
Oh Única Bendita.
Gloria… Ahora… - Para la Soberana
ODA CUARTA
Oh Virgen Inmaculada, por el
El día está presente y el juicio
Espíritu Santo habías contenido en está a las puertas; Oh alma, vela y
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EL TRIÓDION - 3ER. DOMINGO - DOMINGO DE LA ABSTINENCIA DE LA CARNE
esté alerta; En donde los reyes,
¿Qué harás, alma miserable,
principales, jefes, ricos y pobres y cuando se lleva a cabo el examen?
todo el pueblo, se reúnen juntos, Y ¿Qué respuestas tendrás ante el
para recibir, cada uno, lo merecido Trono? No tienes, pues, frutos de
por sus obras.
justicia a ofrece ante Cristo Tu
Cada uno del pueblo, según su Creador.
rango, será examinado; Los monjes,
Cuando escucho el lloro del ri-
Jerarcas, ancianos, jóvenes, escla-
co y su llanto en las llamas del tor-
vos, seguidores, viudas y vírgenes; mento; Entonces, con llantos lloro,
Todos serán juzgados; ¡Ay, enton-
yo miserable, despreciado como él;
ces, de aquellos que su vida no se Y a Ti suplico rogando que tengas
encuentre sin pecado!
piedad de mí en el Día del Juicio,
Tu Justicia no tiene simpatías y Oh Salvador del mundo.
Tu Trono no acepta palabras ador-
Gloria…
nadas, convicciones de los elocuen-
Glorifico al Hijo y al Espíritu
tes y tampoco errores y que proceden del Padre, como Luz
justificaciones de testigos que oscu-
y Rayo del Sol. Más el Uno por la
rezcan la verdad; Porque los secre-
generación, pues es nacido; Y el
tos de todos son revelados ante Ti, Otro por la aparecían, pues es so-
Oh Dios.
bresaliente: Trinidad Divina Con-
Oh Cristo el Verbo ¡Ojalá que substancial en la eternidad,
no venga yo a la tierra de los la-
Adorada por toda la creación.
mentos, no contemplara el lugar de
Ahora… - Para la Soberana
la oscuridad, que no sean atadas
Te habías manifestado, Oh Vir-
mis manos y pies y esté arrojado gen; Engendraste a un Niño, con-
fuera de Tu Cámara! Pues he pro-
servando la pureza; Pues diste a
fanado la túnica de la incorruptibi-
luz al Dios y Hombre Quien es Uno
lidad, yo miserabilísimo.
en Sí, con ambas figuras. Por eso,
Cuando separes los pecadores Tu Maravilla, Oh Madre de Dios,
de los justos, en el Día del Juicio del asombra todo oído y toda mente.
mundo; Considérame, entonces, de
KATAVASÍA CUARTA
Tus ovejas, Oh Amante de la huma-
“El Profeta oyó de Tu Venida, Oh
nidad y sepárame del grupo del Señor y tuvo miedo; Y que habías
ardor, para que escuchare aquella
de nacer de la Virgen y aparecer a
Bendita Voz Tuya.
los hombres, pues clamó: ‘He oído
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EL TRIÓDION - 3ER. DOMINGO - DOMINGO DE LA ABSTINENCIA DE LA CARNE
Tu Fama y tuve miedo, Gloria a Tu naturaleza, y no hay otro que Ti,
Poder, Oh Señor’.”
exento de la corrupción.
ODA QUINTA
Gloria…
¡Indescriptible estremecimien-
Te alabo, Oh Trinidad, El Dios
to y temor habrá allí! Porque el Se-
Unificado por naturaleza, Eterno e
ñor vendrá, y con Él, las obras de Incomprensible, de Un solo Reino y
cada uno de los humanos. ¿Quién, muy Perfecta Soberanía; El Dios,
entonces, no llora por si mismo, Luz, Vida y Creador del mundo.
lamentándose?
Ahora… - Para la Soberana
El rió de fuego y la oscuridad
Claramente, Oh Honorable, las
máxima me atemorizan; El rugir de leyes de la naturaleza se habían
dientes me derrite. ¡Ojalá yo supie-
desvanecido por Tu Alumbramien-
ra que hacer para obtener la Bene-
to Sobrenatural. Porque, sin simien-
volencia de Dios!
te, diste a luz al Dios nacido del
Padre
¡Compadécete de mí, Oh Se-
ñor, compadécete de mí, yo Tu antes de los siglos.
siervo! Y no me entregues a los
KATAVASÍA QUINTA
atormentadores amargos y duros “‘Me levanto a medianoche’ a Ti,
Ángeles; Pues, por ellos, allí no hay
suplicándote, Oh Amante de la
descanso.
humanidad; Ilumíname, pues, y
El principal y subordinado, ri-
guíame hacia Tus Mandamientos.
co y pobre, magnífico y humilde
Y enséñame a hacer Tu Voluntad,
grande y pequeño; Allí serán juz-
Oh Salvador.”
gados por igual. Pues, ¡Ay de aquél
ODA SEXTA
que no esté preparado!
Si te manifestares desde el cie-
No mires, Oh Señor, y perdona lo, en cuando a Tu Temible Venida,
todo lo que he cometido ante Ti. Oh Cristo, y los Tronos estén pues-
No me manifiestes allí, delante de to y los libros abiertos; Entonces,
Tus Ángeles, en la condena de fue-
compadécete y apiádate, Oh Salva-
go lleno de infinita vergüenza.
dor, de Tu Obra.
¡Compadécete de mí, Oh Se-
Allí, Oh alma, en cuando Dios
ñor, compadécete de mí, yo Tu es el Juez, nada puede ayudar, ni
obra! Pues he pecado. Perdóname ciencia, ni oficio, ni gloria y amis-
Tú, porque eres el Único Puro por tad, sino el poder de tus obras.
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EL TRIÓDION - 3ER. DOMINGO - DOMINGO DE LA ABSTINENCIA DE LA CARNE
Allí, Oh alma, en donde se jun-
KATAVASÍA SEXTA
tan el principal y el subordinado, el “De todo mi corazón clamé al Dios
rico y el pobre; No hay padre que
Compasivo, y desde el abismo
socorra, ni madre que ayude o her-
profundo me oyó, levantando mi
mano que salva del Juicio.
vida de la corrupción.”
Piensa, Oh alma, en el Temible
KONTAKIÓN, ÍKOS, SINAXÁRION
Juicio del Juez y teme, desde aquí,
y prepare una respuesta; Para que Después de leer el Kontakión y el Íkos del Tono de
no seas condenada a cadenas per-
la Resurrección, los siguientes
petuas.
Kontakión - Tono Primero
¡Ojalá! No oyere de Ti, Oh Se-
¡Oh Dios! Cuando vengas con
ñor, siendo expulsado por Ti: “Lle-
Gloria sobre la tierra; Y todo tiem-
va lo tuyo y vete al maldito fuego.” bla ante Ti; Y el río de fuego corre
Sino, la anhelada voz convocando a fluyendo ante el Estrado; Los libros
los justos.
estén abiertos y los secretos revela-
dos; Entonces libérame del fuego
Libérame, Oh Señor, de las inextinguible y hazme digno de es-
puertas del infierno, de los abis-
tar a Tu Diestra, ¡Oh justo Juez!
mos, de la oscuridad tenebrosa, del
gemir del infierno, del inextingui-
Íkos
ble fuego y de todo castigo eterno.
Me agito y tiemblo, siendo re-
prendido por mi conciencia, al me-
Gloria…
ditar en Tu Juicio Terrible, Oh
Alabo la Única Divinidad Tri-
Bondadosísimo Señor; Pues me re-
na: Padre, Hijo y Espíritu Divino, cordé el Día del juicio, cuando Te
El Poder de Una Sola Soberanía, sientes en el Trono, para dictar las
dividida en Esencia de Tres Perso-
sentencias. En aquél entonces, nin-
nas.
guno podrá negar sus pecados,
Ahora… - Para la Soberana
porque la verdad reprenderá, el
Tú eres, Oh Inmaculada, la temor se apoderará, el fuego del
puerta por la que atravesó sólo, infierno se arderá fluyendo gran-
Aquél que entró y salió sin desatar demente y los pecadores crujirán
los candados de la virginidad; Cris-
con sus dientes; Por lo tanto, com-
to, Tu Hijo, Quien creo e hizo a padécete de mí, antes que perecie-
Adán.
re, y ten piedad de mí, ¡Oh justo
Juez!
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EL TRIÓDION - 3ER. DOMINGO - DOMINGO DE LA ABSTINENCIA DE LA CARNE
Sinaxárion
piadas del camino, para que
Después de leer el Sinaxárion del día celebrado,
encontraras Misericordioso, al
será leído el Sinaxárion del domingo:
Compasivo Dios de nuestros pa-
En este día celebramos la con-
dres.
memoración de la Segunda Venida
de nuestro Señor Jesucristo, como
El inextinguible ardor me mo-
Juez.
lesta, el gusano amargo me hace
(1º Stíjo) Cuando estés sentado para
temblar y el infierno corruptor del
juzgar la tierra, ¡Oh Justo, Juez Ver-
alma me da miedo; Y a pesar de
dadero!
ello nunca me sometí. Pero Tú, Oh
(2º Stíjo) Hazme, a mí también, dig-
Señor, afírmame en Tu Temor antes
no de oír la vos que clama: “¡Ve-
que pereciere.
nid!”. Por la multitud de Tu
Me prosterno ante Ti, Oh So-
Inefable Compasión, Oh Cristo berano; Y como lágrimas Te ofrezco
Dios, haznos dignos de oír Tu Im-
mis palabras. Porque he pecado de
presionante Voz, y cuéntanos entre lo que la adúltera no pecó, y trans-
aquellos que están a Tu Diestra y gredí, con lo que ninguno sobre la
ten piedad de nosotros. Amén.
tierra cometió. Pero Tú, Oh Señor,
apiádate de Tu criatura y llámame
ODA SÉPTIMA
nuevamente.
Venid, Oh fieles, anticipemos y
arrodillémonos llorando antes de
Arrepiéntete, Oh alma, y vuél-
aquél Juicio; En cuando se desmi-
vete, revelando tus secretos y dile a
nuyen los cielos, caen los astros y Dios, Que todo lo conoce: “Sólo Tú,
tiembla toda la tierra; Para que en-
Oh Salvador, conoces mis secretos,
contremos Misericordioso, al Dios tenme piedad, pues, conforme a Tu
de nuestros padres.
Gran Misericordia, como lo canta
David.”
¡El examen es sin amabilidad y
Gloria…
el juicio allí es terrible! En donde el
Alabo la Trinidad Unida en
Juez es minucioso y no hay estro-
Esencia y Una; La Trina en figuras,
peo a causa del soborno; Pero Tú, Que son el Padre, el Hijo y el Espí-
Oh Soberano, compadécete de mí, ritu Santo, sólo Poder, sola Obra,
y libérame de todo Tu Terrible Cas-
sola Opinión, Un solo Dios tres ve-
tigo.
ces Santo, Un solo Reino de una
El Señor viene a juzgar ¿Quién sola Soberanía Sublime.
soportará verlo? Tiembla, pues, al-
Ahora… - Para la Soberana
ma miserable y prepara obras apro-
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EL TRIÓDION - 3ER. DOMINGO - DOMINGO DE LA ABSTINENCIA DE LA CARNE
El Dios de esplendorosa Her-
hay una ayuda salvo las obras por
mosura, había venido de Tu Vien-
los siglos.
tre, Oh Inmaculada Novia de Dios,
Oh Juez de todos, Señor mío y
como un Rey revestido de una tú-
Dios mío; Quizás escuchare Tu Voz
nica púrpura, tejida por Dios y te-
distinguible, contemplare Tu Mag-
ñida místicamente de Tu Sangre nífica Luz, viere Tus Moradas y mi-
Preciosa,
rare Tu Gloria, regocijando por los
y reinó sobre la tierra.
siglos.
KATAVASÍA SÉPTIMA
Tenme piedad, Oh Salvador y
“Hemos pecado y cometido Justo Juez; Sálvame del fuego y las
iniquidades e injusticias delante de amenazas que, merecedor, estoy
Ti. Y no hemos guardado ni hemos
por soportar; Y por la virtud y el
hecho Tus Mandamientos. Pero Tú, arrepentimiento, perdóname antes
no nos entregues a la consumación, que pereciere.
Oh Dios de nuestros padres.”
Oh Cristo el Compasivo, cuan-
ODA OCTAVA
do Te sientes para el juicio y reveles
Tu Temible Gloria, ¡Que temor será
Oh Señor, cuando me recuerdo entonces; El horno de fuego estará
de Tu Temible Segunda Venida, ardiendo y todos temiendo de Tu
tiemblo de Tus Amenazas y temo Insoportable Sentencia!
de Tu Ira; Por eso exclamo dicien-
do: “Sálvame de esta hora por los
Bendigamos al Padre, al Hijo y al
siglos.”
Espíritu Santo
Adoro Un Solo Dios en Esen-
Si juzgas todo lo creado, Oh cia, y alabo Tres Personas separa-
Dios, ¿Quién de los terrenales so-
das sin sufrir cambio alguno.
portaría Tu Sentencia, habiendo Porque la Divinidad es Una en tres
sido rodeado de las pasiones? Allí, figuras: Padre, Hijo y Espíritu Di-
pues, está el inextinguible fuego, el vino.
gusano y el gran grujir que se apo-
derará de los condenados por los
Ahora… - Para la Soberana
siglos.
Cristo brilló de Ti, Oh Inmacu-
lada, viniendo, como el Novio, de
Cuando convocas toda alma a Tu Luminoso Vientre; Luz para los
un solo lugar, para el examen; En-
que yacientes en las tinieblas. Por-
tonces habrá un gran temor e in-
que el Sol de la Justicia brilló res-
descriptible apuro; Pues a nadie
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EL TRIÓDION - 3ER. DOMINGO - DOMINGO DE LA ABSTINENCIA DE LA CARNE
plandeciendo e iluminando al
Daniel se estremeció atemori-
mundo.
zado de la hora del juicio; ¿Qué me
ocurriría, pues, a mí miserable, en
KATAVASÍA OCTAVA
cuando venga aquél Día Temible?
Alabemos, bendigamos y adoremos al
Señor
Pero Tú, Oh Señor, otórgame an-
“Alaba, Oh creación, con Todo lo
tes del fin, el adorarte como te es
que respira y bendice a Aquel a
complaciente y que mereciere Tu
Quien las huestes celestiales Reino.
glorifican, y los Querubines y
Las llamas están preparadas,
Serafines Le temen. Y exaltadle por así como los gusanos, la gloria, el
todos los siglos.
júbilo, el regocijo, el descanso, la
luz que no es mezclada con tinie-
Diácono o Sacerdote:
“A la Madre de Dios, Madre de la Luz,
blas y la alegría de los justos.
con himnos honrémosle engrandeciendo” ¿Quién, pues, el feliz que será salvo
(Ver el Oficio de los Maitines)
de los castigos primeros y heredará
los bienes de los segundos?
LAS MAGNIFICACIONES
Con todos sus versículos, (Lucas 1: 46 - 55)
¡Que la ira de Tu Castigo no
Como en el domingo del Fariseo y el Publicano.
me aleje de Tu Cara! No me hagas
(Refiérase a páginas 8 y 9)
escuchar la voz que dice: “Alejaos
de Mí, malvados, al fuego eterno”
ODA NOVENA
Pero Tú, hazme entrar entonces, a
El Señor viene para castigar a mí también, junto a Tus Elegidos y
los pecadores y salvar a los Justos. Santos, al gozo Incorruptible de Tu
Asustémonos, lloremos e imagine-
Cámara.
mos aquel día, en el cual todo lo
La mente se había lastimado, el
secreto y oculto de los hombres se-
cuerpo marchitado, el espíritu en-
rá revelado; Y cada uno será re-
fermado, el habla debilitada, la
compensado según su merecido.
edad muerto y el final llegado a las
Moisés quedo aterrado y reve-
puertas. ¿Qué harás, pues, alma
rente al verte de atrás; ¿Cómo, miserable, si el Juez viene a revelar
pues, en cuando vengas, soportaría tus cosas?
contemplar Tu Cara, yo miserable?
Gloria…
Pero Tú, Oh Misericordioso, míra-
Oh Único Padre que engendró,
me con Tu Compasiva Mirada y y el Hijo Unigénito la Única Luz
perdóname.
que brilló de la Luz Única y el Úni-
co Espíritu Santo; Un Solo Dios,
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EL TRIÓDION - 3ER. DOMINGO - DOMINGO DE LA ABSTINENCIA DE LA CARNE
Señor de Señor, Oh Santísima Tri-
EXAPOSTELARIÓN
nidad Una, Sálvame, a mí el orador
1- De la Resurrección, según la Eotina
de Tu Divinidad.
2- Del Triódion
Ahora…
Cuando me acordare del Día
El Milagro de Tu alumbra-
Temible del Juicio y de Tu Miste-
miento, Oh Exenta de toda mancha, riosa e Inefable Gloria, tiemblo en-
me asombra y me perpleja mucho. teramente, Oh Señor y tengo
¿Cómo concebiste del Inalcanzable, miedo; Por eso, a Ti exclamo, Oh
sin siembra? Dinos ¿Cómo diste a Cristo Dios: “Libérame, a mí des-
luz y permaneciste virgen? Y Te venturado, de todo castigo, cuando
deviniste en Madre del Nacido de vengas con Gloria, a la tierra, a juz-
manera sobrenatural? Quien acepta gar toda la creación; Y hazme dig-
a los que se prosternan ante Él con no de estar a Tu Diestra, Oh
fe, porque Él es Capaz de hacerlo Soberano.
todo.
3- Otro
KATAVASÍA NOVENA
¡He aquí, se acerca el día del
“El alumbramiento es inefable,
Señor Todopoderoso! ¿Quién so-
porque la concepción ha sido sin
portará el temor de Su Presencia?
simiente y sin corrupción; De una
Pues es un día de ira y como el hor-
Madre que no conoció hombre no es ardiente; En el cual, el Juez se
alguno; Porque el nacimiento de
sentará para el juicio y recompen-
Dios ha renovado la naturaleza.
sará a cada uno según sus obras.
Por consiguiente, con fe ortodoxa,
4- Para la Soberana
todas las generaciones te
A1 pensar en la hora de rendir
magnifican, porque eres Madre y
cuenta y en la venida del Señor,
Novia de Dios.”
Amante de la humanidad, tiemblo
L
enteramente. Por eso, con angustia,
A PEQUEÑA LETANÍA
(Ver el Oficio de los Maitines)
a Ti clamo: “Por las intercesiones
Y después de la exclamación del Sacerdote:
de la Madre de Dios, acéptame,
“Porque a Ti alaban todos lo poderes...”
arrepentido, Oh Único Misericor-
Coro:
diosísimo y Justo Juez mío.”
Santo es el Señor, nuestro Dios.
(Tres veces)
EL AÍNOS
Exaltad al Señor nuestro Dios. Postraos
“Las Alabanzas”
ante Su (Pedestal o Monte Santo), Santo
Serán retenidos Ocho Stíjos y serán cantadas
es el Señor, nuestro Dios. (Salmo 98 “99”:9)
Cuatro Estijéras y una Anatoliana para la
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EL TRIÓDION - 3ER. DOMINGO - DOMINGO DE LA ABSTINENCIA DE LA CARNE
Resurrección, y tres Idiomálatas del Trió-
dos serán parecidos y lo oculto de
dion.
todos será revelado ante Ti. Los
Según el Tono de la Resurrección
que no se han arrepentido en su
Todo lo que respira alabe al vida llorarán lamentando e irán al
Señor. (Salmo 150: 6) Alabad al Señor fuego ardiente. Mas los justos, con
desde los cielos; Alabadle en las júbilo y regocijo, entrarán en la
alturas. (Salmo 148:1) A Ti es debida la Cámara Celestial.
alabanza, Oh Dios. (Salmo 65:1)
7- ¡Levántate, Señor, alza Tu Mano, Oh
Alabadle, vosotros todos sus Dios! ¡No Te olvides de los desdichados!
ángeles; Alabadle, vosotros todos
(Salmo 10: 12)
¡Qué hora aterradora y qué día
sus poderes. (Salmo 148: 2) A Ti es debi-
terrible serán entonces! Cuando el
da la alabanza, Oh Dios. (Salmo 65: 1)
Juez esté sentado en el estrado te-
1- Esta gloria es para todos Sus justos.
rrible; Los libros serán abiertos, las
2- Alabad a Dios en Su Santuario, obras reprochadas, los secretos te-
alabadle en el firmamento de Su Fuerza.
nebrosos revelados y los Ángeles
(Salmo 150: 1)
vendrán y congregarán a todas las
3- Alabadle por Sus Grandes Hazañas, naciones. ¡Venid, escuchad, Oh re-
alabadle por Su Inmensa Grandeza.
(Ídem. 2)
yes y príncipes, esclavos y libres,
4- Alabadle con clangor de cuernos, pecadores y justos, ricos y pobres;
alabadle con arpa y con citara.
Vendrá Pues Aquel Que ha de juz-
(Ídem. 3)
gar al mundo. ¿Quién resistirá,
Anatoliana
pues, estando de pie ante Él, cuan-
5- Alabadle con tamboril y danza, do los Ángeles estén parados de-
alabadle con laúd y flauta.
(Ídem: 4 - 5)
lante de Él, reprochando las obras,
Y estas Tres Idiomálatas del Triódion
los pensamientos y las opiniones
Tono Sexto
que vengan de día y de noche?
6- Alabadle con címbalos sonoros, ¡Qué hora terrible será aquélla, en-
alabadle con címbalos de aclamación,
tonces! Por eso, esté atenta, Oh al-
¡Todo cuanto respira alabe al Señor!
ma y antes de perecer exclama
(Ídem: 5 - 6)
diciendo: “Vuel-ve, Oh Dios y sál-
Me imagino aquel Día y aque-
vame, porque Tú Solo eres Compa-
lla hora, en la que, como condena-
sivo”.
dos, estaremos desnudos ante el
Juez Justo. Entonces, con gran voz,
Tono Octavo
sonará la trompeta; Se sacudirán 8- Te doy gracias, Señor, de todo corazón,
los cimientos de la tierra; Los muer-
cantaré todas Tus Maravillas.
(Salmo 9: 2)
tos se levantarán de las tumbas, to-
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EL TRIÓDION - 3ER. DOMINGO - DOMINGO DE LA ABSTINENCIA DE LA CARNE
Cuando Daniel, el profeta, se
ha devenido en hombre de los de-
seos, y vio la Soberanía de Dios ex-
clamó así: “El tribunal fue puesto y
DIVINA LITURGIA
los libros abiertos.” Por eso, mira En la Divina Liturgia se cantan los Salmos Típi-
alma mía; ¿Ayunarás? Pues, no
cos la Oda Sexta del Octoijós y del Triódion:
traiciona a tu prójimo, ¿Evitarás la
TROPARIOS
gula? Entonces, no juzgues a tu
1- Del Tono de la Resurrección
hermano, para que no seas enviado
2- Del Santo Patrono del Templo
al fuego y consumido como cera;
3- Kontakión - Tono Primero
Para no tener obstáculo alguno que
¡Oh Dios! Cuando vengas so-
impedirá Cristo que te entrara con-
bre la tierra con gloria; Y todo
sigo a Su Reino.
tiembla ante Ti; Y el río de fuego
Gloria - Tono Primero
corre fluyendo ante el Estrado; Los
Anticipemos, Oh hermanos, y libros estén abiertos y los secretos
purifiquémonos para la reina de revelados; Entonces libérame del
todas las virtudes; Pues, he aquí fuego inextinguible y hazme digno
viene, trayéndonos una fortuna de de estar a Tu Diestra, ¡Oh justo
bienes, apagando los lanzamientos Juez!
de las pasiones y reconciliando a
LAS LECTURAS SAGRADAS
los transgresores con el Soberano.
P
Recibámosla, por tanto, con alegría,
ROKÍMENON - Tono Segundo
exclamando a Cristo Dios: “Oh Tú,
Mi fuerza y mi cántico es el Señor.
(Salmo 117 ‘118’: 14a.)
que resucitaste de entre los muer-
(Stíjo) Me castigó el Señor, pero a la
tos, guárdanos sin condenación, a
muerte no me entregó.
nosotros que Te glorificamos, Oh
(Ídem.: 18)
Único Exento del pecado.”
LA EPÍSTOLA
Ahora… - Tono Segundo
Lectura de la Primera Carta del Apóstol
“Tú excedes todas las bendiciones,…”
San Pablo a los Corintios
(Ver página 10)
[1ª Corintios 8: 8 - 9: 2]
Hermanos: 8No es ciertamente
LA DOXOLOGÍA
la comida lo que nos acercará a
Tropario - Tono Cuarto
Dios. Ni somos menos porque no
“Hoy aconteció la Salvación…”
comamos, ni somos más porque
(Ver página 11)
comamos. 9Pero tened cuidado que
esa vuestra libertad no sirva de tro-
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EL TRIÓDION - 3ER. DOMINGO - DOMINGO DE LA ABSTINENCIA DE LA CARNE
piezo a los débiles. 10En efecto, si geles, entonces se sentará en Su
alguien te ve a ti, que tienes cono-
Trono de gloria. 32Serán congrega-
cimiento, sentado a la mesa en un das delante de Él todas las nacio-
templo de ídolos, ¿no se creerá au-
nes, y Él separará a los unos de los
torizado por su conciencia, que es otros, como el pastor separa las
débil, a comer de lo sacrificado a ovejas de los cabritos. 33Pondrá las
los ídolos? 11Y por tu conocimiento ovejas a su derecha, y los cabritos a
se pierde el débil: ¡El hermano por su izquierda. 34Entonces dirá el Rey
quien murió Cristo! 12Y pecando así a los de su derecha: ‘Venid, bendi-
contra vuestros hermanos, hiriendo tos de Mi Padre, recibid la herencia
su conciencia, que es débil, pecáis del Reino preparado para vosotros
contra Cristo. 13Por tanto, si un ali-
desde la creación del mundo;
mento causa escándalo a mi her-
35porque tuve hambre, y me disteis
mano, nunca comeré carne para no de comer; tuve sed, y me disteis de
dar escándalo a mi hermano. 9: 1¿No beber; era forastero, y me acogis-
soy yo libre? ¿No soy yo apóstol? teis; 36estaba desnudo, y me vestis-
¿Acaso no he visto yo a Jesús, Se-
teis; enfermo, y me visitasteis; en la
ñor nuestro? ¿No sois vosotros mi cárcel, y vinisteis a verme.’
obra en el Señor? 2Si para otros no 37Entonces los justos le responde-
soy yo apóstol, para vosotros sí que rán: ‘Señor, ¿Cuándo te vimos ham-
lo soy; pues ¡Vosotros sois el sello briento y Te dimos de comer; O
de mi apostolado en el Señor!
Sediento, y Te dimos de beber?
38¿Cuándo Te vimos Forastero, y Te
Después de la lectura de la Epístola, se canta el
acogimos, o Desnudo, y Te vesti-
Aleluya - Tono Segundo
mos? 39¿Cuándo Te vimos Enfermo
¡El Señor te responda el día de la
o en la cárcel, y fuimos a verte?’ 40Y
an-
el Rey les dirá: ‘En verdad os digo
gustia! (Salmo 19 ‘20’ 1 a.)
que cuanto hicisteis a unos de estos
(Stíjo) ¡Salva a Tu pueblo, bendice a
hermanos míos más pequeños, a mí
Tu heredad! (Salmo 27 ‘28’ 9a.)
me lo hicisteis.’ 41Entonces dirá
EL SANTO EVANGELIO
también a los de Su Izquierda:
Lectura del Santo Evangelio según San
‘Apar-taos de mí, malditos, al fue-
Mateo
go eterno preparado para el Diablo
[Mateo 25: 31 - 46]
y sus ángeles. 42Porque tuve ham-
Dijo el Señor: “31Cuando el bre, y no me disteis de comer; tuve
Hijo del Hombre venga en Su Glo-
sed, y no me disteis de beber; 43era
ria acompañado de todos Sus Án-
Forastero, y no me acogisteis; esta-
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ba Desnudo, y no me vestisteis; En-
la Trinidad Indivisible, porque Ella nos
fermo y en la cárcel, y no me visi-
ha salvado.”
tasteis.’ 44Ento-nces dirán también “Bendito sea el Nombre del Señor, desde
éstos: ‘Señor, ¿Cuándo Te vimos
ahora y hasta el fin de los siglos.”
Hambriento o Sediento o Forastero
(Tres veces)
o Desnudo o Enfermo o en la cár-
APÓLISIS
cel, y no Te asistimos?’ 45Y Él en-
La clausura de la Liturgia
Es el común de los domingos, si no una fiesta
tonces les responderá: ‘En verdad
del Señor; Etc.
os digo que cuanto dejasteis de
hacer con uno de estos más peque-
ños, también con-migo dejasteis de
hacerlo.’ 46E irán éstos a un castigo
eterno, y los justos a una vida eter-
na.”
Después de la lectura del Santo Evange-
lio: El resto de la Divina Liturgia de
San Juan Crisóstomo
Verdaderamente es digno y
debido que Te celebremos, Oh
Madre
de Dios, Siempre Bienaventurada y
exenta de toda mancha, la Madre
de nuestro Dios. Y seguimos con
Oh más Honorable que los
querubines e incomparablemente,
más Gloriosa que los serafines; Tú
que sin corrupción has dado a luz
al Verbo Dios; Verdaderamente
eres la Madre de Dios, a Ti magni-
ficamos.
QUENENIKÓN
“Alabad al Señor desde los cielos, ala-
badle en las alturas. Aleluya.”
“Hemos visto la verdadera Luz, hemos
recibido al Espíritu Celestial y hemos
encontrado la verdadera fe; Adoremos a
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